Nacional

Abren centro comunitario en Guerrero por sentencia de CorteIDH

Inauguran la Casa de los Saberes “Gúwa Kúma”, un Centro Comunitario y Albergue de niñas y niños, en Ayutla de los Libres, en Guerrero. Esto responde a una de las medidas de reparación que emitió la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) en su sentencia de 2010, por el caso de violación y tortura sexual de la que fue víctima Inés Fernández Ortega, en marzo de 2002, por parte de elementos del Ejército.

En la inauguración estuvo presente Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), quien dijo que el evento es un hecho relevante, para Inés y su familia, así como para toda la comunidad. Señaló que no sólo se trata de un espacio que se dedicará a la erradicación de la violencia contra las mujeres, sino que también “se trata de un acto de justicia y de reivindicación de la compañera Inés”.

Sostuvo que el caso de Inés llegó a instancias internacionales que declararon culpable al Estado Mexicano por la falta de investigación y sanción  a los responsables de esta arbitrariedad y emitió una sentencia histórica en materia de violencia de género e interculturalidad. Agregó que uno de los logros fue la modificación del Artículo 57 del Código de Justicia Militar para “limitar la jurisdicción militar y que todo delito cometido por elementos de  las fuerzas armadas en contra de civiles sea juzgado en el ámbito del fuero civil”.

Lamentó que pese a las medidas de reparación colectiva que emitieron las cortes internacionales, en 2010, no se cumplieron a lo largo de más de una década, sino hasta la actual administración. Enfatizó que este centro comunitario tiene la finalidad “de prevenir y atender las distintas violencias que enfrentan mujeres, niñas y niños en la región a través de orientación psicológica, médica y legal” para garantizar la no repetición de los hechos.

Por su parte, Inés Fernández en un discurso en su lengua originaria, el mè’phàà, consideró que hoy inicia un importante trabajo, pero aún faltan muchas cosas.

“Nosotras hemos conformado un consejo porque vamos a trabajar en este lugar. Falta luz, falta agua, bomba para tener agua suficiente, mesas, lo mismo para el albergue. Han pasado 11 años desde que se emitió la sentencia y no se había cumplido, pero que bueno que hoy estamos aquí”.

Dijo que ella no quiere “que otras niñas y niños sufran lo que sufrieron mis hijos, por eso es muy importante el albergue. Tampoco quiero que otras mujeres indígenas vivan lo que yo viví, hace varios años”.

Además denunció que en las comunidades hay muchas carencias y necesidades que también deben atenderse, “los caminos están en malas condiciones y con el sismo hay viviendas dañadas, queremos aprovechar para pedir su apoyo e intervención para estas necesidades”.

 

El caso de Inés Fernández y Valentina Rosendo 

El 22 de marzo de 2002, en el pueblo de Barranca Tecuani, ubicado en el municipio de Ayutla de los Libres, Inés, una mujer indígena mé’pháá, fue víctima de violación y tortura sexual por parte de elementos del Ejército quienes ingresaron violentamente a su casa y perpetraron dichos delitos frente a sus hijos.

Un mes antes, Valentina Rosendo fue víctima del mismo delito por parte de elementos del Ejército cuando se disponía a bañarse en un arroyo cerca de su domicilio.

Desde entonces ambas iniciaron una larga lucha en búsqueda de justicia. Ambos casos se enmarcan en el contexto de violencia y presencia de grupos militares en la entidad, como parte de la estrategia de la guerra contra el narcotráfico.

Los casos, al ser agotados en instancias federales, fueron llevados a la CorteIDH, quienes dictaron las respectivas sentencias en 2010 y encontraron culpable al Estado mexicano. El tribunal internacional emitió medidas de reparación comunitarias.

Tlachinollan Centro de Derechos Humanos de la Montaña señala que “en el caso de Valentina se ordenó la creación de un Centro de Salud en Caxitepec, municipio de Acatepec y en el caso de Inés determinó la creación de un Centro Comunitario y Albergue de niñas y niños en Ayutla de los Libres”.

El Centro de Derechos Humanos declaró que el Centro de Salud continúa inconcluso y sin atención, porque no cuenta con personal de salud ni con medicamentos necesarios, para garantizar una atención básica.

Con el Centro Comunitario, denunciaron que Inés ha batallado por 11 años.

La construcción del centro quedó inconcluso en el período de Enrique Peña Nieto. A nivel estatal, hubo un manejo fraudulento de los recursos en la administración de Aguirre Rivero”.

Fue hasta 2019, bajo la administración actual que se retomó el caso, a través de la Segob en coordinación con el gobierno de Guerrero, para concluir la construcción del centro. No obstante, “aún persisten fallas graves, como la carencia del servicio de energía eléctrica y el insuficiente mobiliario para su adecuada operación”, afirma el centro Tlachinollan.

Gúwa Kúma “la Casa de los Saberes”, es decir, la casa de las sabias, estará bajo la coordinación de las mujeres de la comunidad y contarán con un equipo de profesionistas que hablen la lengua mé’pháá, para brindar una atención acorde a su realidad sociocultural, en su lengua materna y con perspectiva de género, afirma el centro de derechos humanos.

Deja un comentario

Back to top button