Monitoreo acústico sirve para conocer la salud de los arrecifes de coral

Científicos colocaron dispositivos en el lecho marino en Indonesia. Son oídos que permiten estudiar la salud de estos ecosistemas desde una perspectiva hasta ahora poco explorada.

“El monitoreo acústico pasivo es una práctica en la que colocamos hidrófonos, que son micrófonos especiales que usamos bajo el agua. simplemente los dejamos ahí y escuchamos, ellos pueden realizar esta tarea durante periodos largos de tiempo, pueden hacerlo por semanas, meses y tal vez más tiempo. la idea es tener estos oídos en el océano simplemente para que puedan escuchar para nosotros y que podamos colectar datos útiles’’, afirmó Iben Williams, líder de proyecto paisaje acústico Marino.

Estos hidrófonos o micrófonos submarinos son capaces de captar la dispersión de frecuencias sonoras bajo el agua.

Pueden diferenciar sonidos de origen biológico de aquellos que producen los animales, así como los que están relacionados con movimientos de placas o volcanes en el mar. También detectan aquellos producidos por barcos o máquinas operadas por humanos.

Las grabaciones obtenidas son analizadas mediante un sistema de inteligencia artificial que realizará un diagnóstico de la salud del ecosistema estudiado.

“La forma en la que trabaja nuestro sistema de inteligencia artificial es calculando una gran cantidad de distintas mediciones que tenemos de estas grabaciones. Puede ser algo tan simple como qué tan ruidosa es una grabación o puede ser algo mucho más complejo como las relaciones entre las distintas bandas de frecuencia. estos detalles no serían importantes”, aseguró Iben Williams.

Asimismo, dijo que con estos se tiene un gran rango de mediciones distintas que “presentamos en estas grabaciones y la inteligencia artificial nos permite identificar los rasgos característicos de las mediciones en un arrecife saludable y después le podemos presentar las mediciones de un arrecife degradado’’.

De acuerdo con los especialistas, su sistema les permite identificar patrones y características específicas que para los sentidos humanos sería muy complicado reconocer.

Por su parte, Syafyudin Yusuf, investigador de la Universidad de Hasanuddin, aseguró que este sistema se puede ayudar a ser más eficientes en los trabajos de conservación, reducir la mano de obra que se requiere y también los costos del monitoreo de los arrecifes en Indonesia.

Un reporte de la red de monitoreo global de los arrecifes de coral indica que entre 2009 y 2018 se perdió 14% de arrecifes coralinos en todo el mundo, lo equivalente a 11 mil 700 kilómetros cuadrados.

Por ello, una herramienta como esta representa una esperanza para contribuir en los trabajos de conservación de estos ecosistemas marinos.