El Programa Alimentario Mundial de las Naciones Unidas (PAM) anunció reducciones suplementarias de su ayuda a Yemen a causa de un déficit crónico de los financiamientos, de la inflación, así como de las repercusiones del conflicto en Ucrania.
En Yemen, el país de 30 millones de habitantes más pobre de la península arábica, el PAM dice ayudar a 19 millones de personas, dos tercios de las cuales (13 millones) reciben una ayuda alimentaria de urgencia.
“Estamos ahora obligados a reducir ese apoyo a 5 millones de personas a menos de 50% de las necesidades cotidianas y a 25% de las necesidades cotidianas para los otros 8 millones”, indicó el PAM en un comunicado.
Yemen está devastado desde 2014 por una guerra que opone las fuerzas gubernamentales, apoyadas por una coalición militar encabezada por Arabia Saudita desde 2015, a los rebeldes hutíes, apoyados por Irán.
En diciembre, el PAM estimó que “más de la mitad de la población de Yemen, o sea 16.2 millones de personas, se enfrenta a la hambruna aguda y la mitad de niños de menos de cinco años (2.3 millones) se arriesga a sufrir malnutrición”.