La Caravana por la Verdad y Justicia de los Pueblos de Oaxaca inició desde el 9 de agosto cuando salió de la sureña entidad y llegó a Ciudad de México dos días después.
Más de 15 camiones llegaron de diferentes pueblos de Oaxaca para exigirle al Gobierno Federal que brinde acceso a la justicia a los pueblos que han sufrido masacres por agentes del Estado.
Los primeros en hablar fueron los miembros del Comité de Víctimas por Justicia y Verdad, 19 de Junio Nochixtlán.
Venimos para exigir justicia por las masacres que se han cometido, como la orden que dieron el Presidente Enrique Peña Nieto y el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, el 19 de julio de 2016 en Nochixtlán y la Policía Federal reprimió una movilización en apoyo a la mal llamada Reforma Educativa. Ese día hubo nueve compañeros asesinados y según las declaraciones que el secretario de Gobernación, Osorio Chong, dio en esta carpeta de investigación, él afirma que recibió órdenes de sus jefes inmediatos, por eso exigimos a la Fiscalía General de la República que tiene que llamar a declarar al expresidente Enrique Peña Nieto hoy le pedimos a la fiscalía que por mandato judicial o por citatorio tiene que llamar a comparecer el expresidente Peña Nieto en por el caso Nochixtlán”, explicó a Once Noticias, Lenin Pérez de la Red Estatal de Víctimas de Oaxaca en los Pueblos Ikoots.
Según información de los colectivos de la caravana, este 11 de agosto “se va a entrevistar el cuerpo jurídico del comité de víctimas y los abogados de Enrique Peña Nieto para que el expresidente sea citado y comparezca por los hechos del 19 de julio del 2016 en Nochixtlán”.
Otro caso es el de de San Juan del Río, en Huanzantlán, donde 15 personas fueron masacradas por autoridades locales y grupos paramilitares en la región del istmo el 21 de julio del año 2020 en medio de la pandemia.
Once Noticias habló con Alejandrino, un sobreviviente de Huanzantlán quien explicó que el año pasado permanecían en plantón frente a la agencia municipal desde el 5 de mayo, pero nunca lograron una negociación a sus demandas y fue hasta el 21 de julio, a las siete de la noche cuando se dieron cuenta que estaban rodeados por uniformados y civiles que iniciaron la represión contra los manifestantes.
Estuvimos 30 detenidos en la agencia municipal, ahí nos torturaron frente a los policías municipales, estatales y la guardia nacional. Les pedimos auxilio a los uniformados, pero no nos hicieron caso. Esa noche quemaron vivos a 13 hombres y dos mujeres dentro de la agencia municipal”, mencionó el sobreviviente.
La mitad de los detenidos escaparon mal heridos y señalaron que a pesar de sus testimonios no han tenido justicia por esos crímenes.
“Yo fui torturado, pero gracias a dios que salí de ahí, por eso hoy estamos en la caravana, para pedirle justicia a la Fiscalía General de la República, porque nadie nos ha tomado en cuenta. Queremos que paguen los autores de estos crímenes”, reclamó Alejandrino.
El otro caso por el cual se realizó la caravana es por el asesinato de su compañero activista Tomás Martínez, ocurrido el 24 de agosto del 2020. El joven fue asesinado después de haber participado en una marcha. Se dirigía a su comunidad y cuando estaba comiendo fue asesinado por sicarios.
“Este acto lo denunciamos cómo un crimen de Estado, porque el activismo del compañero Tomás Martínez afectaba al cacicazgo local de la sierra sur de Oaxaca, y ese cacicazgo está al servicio del Gobierno local. También es necesario mencionar la agresión que ha sufrido el magisterio con las desapariciones de maestros y los presos políticos”, explicó Lenin Pérez, de la Red Estatal de Víctimas de Oaxaca.
Los manifestantes denunciaron que “no ha parado la represión contra el pueblo, pues siguen asesinando a luchadores sociales y condenando a nuestros presos políticos”.
Los de crímenes de lesa humanidad deben ser castigados y creemos que la única forma que se logre la justicia es por la movilización independiente y callejera de la clase obrera”, concluyó Lenin Pérez.