Ante el Congreso, el presidente de Bolivia, Luis Arce, afirmó que no descansará hasta sancionar a los responsables del golpe de Estado contra el exmandatario, Evo Morales, en 2019.
Tenemos que terminar de cerrar la crisis política abierta por quienes, a través de golpes de Estado y cómplices internacionales para reprimir al pueblo, siempre quieren imponer con violencia lo que no pueden lograr democráticamente en las urnas”, dijo Luis Arce.
La declaración, durante la presentación del informe a la nación, encendió los ánimos de la oposición derechista y la sesión derivó en cruces verbales y amenazas de golpes.
Jeanine Áñez, quien sustituyó a Evo Morales en la presidencia, está sujeta a proceso en prisión como responsable de la destitución del exgobernante indígena.
Sin ambas medidas de lucha, resistencia y movilización instaladas en la conciencia y larga memoria de nuestro pueblo, la democracia no se habría recuperado y el gobierno de facto habría continuado en su afán de extenderse en el poder, utilizando la pandemia como pretexto para seguir violando derechos”, agregó el presidente de Bolivia.
El choque entre legisladores pro y antigubernamentales se trasladó a las calles. El día en que Bolivia conmemora 196 años de su independencia.