Sin permiso de autoridades, el Mercado 2 de Abril ubicado en la colonia Guerrero, a espaldas del Teatro Blanquita, fue intervenido por la alcaldía Cuauhtémoc como parte de su proyecto de “blanqueamiento” en esa demarcación, por lo que la obra fue suspendida.
Luego de un reporte vecinal, autoridades del Centro Histórico inspeccionaron el lugar dado que la intervención se hizo sin las autorizaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) y la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI).
El Mercado fue inaugurado el 2 de abril de 1902 en homenaje a los patriotas que tomaron la ciudad de Puebla el 5 de mayo en 1867, dice una placa en su interior. En principio el lugar se construyó para que fuera un taller de tranvías, sin embargo, en homenaje a Porfirio Díaz, quien también estuvo presente en esa Batalla, se decidió hacerlo mercado.
De acuerdo a la placa, en 1955 hubo una reinauguración cuando era regente Ernesto P. Uruchurtu, y otra, en 1987, con Enrique Jackson, delegado en Cuauhtémoc.
Este mercado es parte del tradicional Barrio de Santa María la Redonda. Fue el primero que se construyó para venta en menudeo en Ciudad de México con un estilo arquitectónico francés: una parte de su techo es muy alta, corren unos enormes ventanales de acero y vidrio que sostienen una estructura sólida de acero –como la del Museo del Chopo y la de la Torre Eiffel–.
José Manuel Oropeza Morales, coordinador general de la Autoridad del Centro Histórico (ACH), en compañía del Fideicomiso Centro Histórico (FCH) acudieron ayer a este lugar, alrededor de las 17:00 horas, para constatar que trabajadores contratados por la alcaldía Cuauhtémoc colocaron plafones sobre una estructura metálica soportada por la estructura original del perímetro del mercado.
Al pedirle las autorizaciones del INAH, INBAL y Seduvi, no fueron presentadas, por lo que la obra se suspendió. Hasta entonces tenía avances en las fachadas norte y oriente, que presentan aplanados sobre el tabique de los muros en 90%, asimismo también se observó que pintaron de color blanco los murales que existían en el faldón. En la fachada poniente, habían empezado el borrado de los murales.
Tales acciones se enmarcan en una iniciativa por parte de Sandra Cuevas, alcaldesa de Cuauhtémoc, que ha causado indignación y polémica entre habitantes capitalinos. Y es que desde marzo de este año la alcaldesa ordenó borrar los rótulos de mil 500 puestos de comercios callejeros con el argumento de “poner orden y disciplina” y de “mejorar la imagen urbana” de la demarcación.
Los rótulos fueron pintados de blanco; en medio, se les colocó el escudo y nombre de la alcaldía.
De acuerdo a información de la Autoridad del Centro Histórico (ACH) se harán las denuncias correspondientes para deslindar responsabilidades, verificar la situación y exigir la reparación de los daños. La ACH informó que tiene facultad para vigilar la conservación de inmuebles emblemáticos que forman parte de la memoria colectiva y constituyen el rostro simbólico de la identidad nacional de este espacio.