El índice de aprobación pública del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, cayó a 39% en una encuesta realizada por Reuters/Ipsos el lunes, lo que reforzó las expectativas de los meteorólogos electorales no partidistas de que su Partido Demócrata no será el más favorecido en las elecciones de mitad de mandato.
La encuesta nacional de dos días encontró que la aprobación de los estadounidenses del desempeño laboral de Biden había disminuido un punto, acercándose al punto más bajo de su presidencia.
La impopularidad de Biden está ayudando a impulsar la opinión de que los republicanos ganarán el control de la Cámara de Representantes y posiblemente también del Senado estadounidense.
El lunes, el Centro de Política de la Universidad de Virginia pronosticó que los republicanos ganarían fácilmente la mayoría en la Cámara de Representantes, obteniendo 24 escaños netos, y que obtendrían una pequeña mayoría en el Senado.
El control de incluso una cámara del Congreso daría a los republicanos el poder de detener la agenda legislativa de Biden.
Al asumir el cargo en enero de 2021 en medio de la pandemia de COVID-19, el mandato de Biden ha estado marcado por las cicatrices económicas de la crisis sanitaria mundial, incluida la inflación vertiginosa. Este año, su índice de aprobación llegó a 36% en mayo y junio.
Economía y aborto
En la encuesta de Reuters/Ipsos de esta semana, alrededor de un tercio de los encuestados eligió la economía como el mayor problema del país, una proporción mucho mayor que aproximadamente uno de cada 10 que eligió el crimen.
Aproximadamente, uno de cada 15 dijo que el mayor problema era el fin del derecho nacional al aborto, luego de la decisión en junio de la Corte Suprema que anuló el derecho al aborto en todo el país.
La encuesta, realizada en línea en todo Estados Unidos, recopiló respuestas de mil 004 adultos, incluidos 424 demócratas y 390 republicanos.
Tiene un intervalo de credibilidad, una medida de precisión, de cuatro puntos porcentuales en ambos sentidos.
Resultados disputados
Al comprometerse a “respetar” los resultados, la presidenta del Partido Republicano contradijo muchas declaraciones de candidatos cercanos a Trump, quien nunca admitió la derrota en las elecciones presidenciales de noviembre de 2020.
Kari Lake, que aspira a ser gobernadora de Arizona, se negó, por ejemplo, a decir que aceptaría una derrota de su contrincante demócrata en este polarizado estado del suroeste de Estados Unidos.
El domingo, medios locales informaron que esta republicana de extrema derecha recibió dos sobres que contenían un polvo blanco sospechoso que el FBI está investigando.
Por otro lado, en Wisconsin, el senador republicano Ron Johnson, que busca la reelección frente al demócrata Mandela Barnes, también rechazó decir si aceptará los resultados.
Según el campo demócrata y analistas, habría unos 300 candidatos republicanos listos para disputar los resultados de los comicios de este martes.