Un total de 47 piezas prehispánicas, pertenecientes a la Zona Arqueológica de Lagartero, ubicada en el estado de Chiapas, las cuales forman parte del patrimonio cultural de nuestro país, fueron entregadas en custodia al Centro INAH Chiapas, por la Dirección de Estudios Arqueológicos (DEA) del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), luego de haber sido objeto de estudios en ese centro de investigación.
Después de una serie de gestiones, las piezas retornaron a su lugar de origen, una vez que fueron investigadas y restauradas por la arqueóloga de la DEA, Sonia Evangelina Rivero Torres, tras cumplir con los trámites de investigación y entrega de informes al Consejo de Arqueología del INAH, instancia de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
Los bienes entregados corresponden a la cultura maya y fueron recuperados durante 18 temporadas de campo del Proyecto Lagartero, municipio La Trinitaria, Chiapas, dirigido por la arqueóloga Rivero Torres.
Objetos de cerámica de la cultura maya
La mayoría de los objetos son de cerámica, entre los que se encuentran vasos policromos, figuras zoomorfas, cajetes y molcajetes.
Asimismo, destacan piezas de metal, entre ellas, las que integran un lote de cinco pendientes con la forma de cabeza de lagarto, además de un anillo de cobre con la representación de un guajolote. También, forman parte del acervo entregado un hueso trabajado y un ámbar.
A partir de los restos de cerámica encontrados en el sitio se ha deducido que Lagartero comenzó a ocuparse desde el año 300 d.C., en el periodo Clásico Temprano, y que perduró hasta el Posclásico Tardío (1200-1400 d.C.).
Las construcciones principales corresponden a más de 15 montículos, de los cuales el más grande alcanza de 12 metros de altura. Cuenta con un juego de pelota, tres pirámides principales y varias plataformas de diferentes tamaños.
Además, durante las exploraciones, arqueólogos del INAH descubrieron los cinco colgantes prehispánicos de cobre referidos, los cuales tienen 600 años de antigüedad. Su forma de cabeza de lagarto, confirma que el nombre de este lugar, de filiación maya, en esa época, debió aludir a dicho reptil, símbolo del inframundo para esta cultura antigua.
Centro INAH Chiapas prevé exposición
La entrega de las 47 piezas fue formalizada por el director y por el subdirector de la DEA, Morrison Limón Boyce y Ramón López Valenzuela, respectivamente, quienes mencionaron la importancia de que el material arqueológico regrese a sus lugares de origen, por tratarse de evidencia material de la larga ocupación humana que tuvo este sitio maya.
“La relevancia de la entrega de estas piezas es que son pocos los materiales que se encuentran en exhibición para el disfrute y conocimiento del público sobre este sitio”, destacaron los arqueólogos.
A su vez, la directora del Centro INAH Chiapas, Olivia Lara Jiménez, dijo que tras la entrega de las piezas se prevé realizar una exposición para que la sociedad conozca el patrimonio cultural de esa región tan importante.