México empató este martes sin goles ante Polonia, en la primera jornada del Grupo C de la Justa Mundialista de 2022. En el duelo fue determinante la participación del arquero mexicano “Memo” Ochoa, quien paró un penal lanzado por Robert Lewandowski.
Con este resultado, el equipo queda liderado por Arabia Saudita, que dio el gran golpe en el encuentro deportivo al ganar 2-1 ante Argentina, seguida por México y Polonia.
En el Stadium 974, ante 40 mil espectadores, prácticamente una marea verde de hinchas del “Tri”, “Memo” Ochoa alargó su leyenda mundialista con una atajada ante la estrella del Barcelona.
En el minuto 54, Lewandowski recibió en el área y sacó petróleo. Disputó un balón con Héctor Moreno, que acabó por derribarlo y el arbitro señaló penal tras consultar el VAR.
Pero el delantero del Barcelona no estrenó su casillero en las Copas del Mundo porque se encontró con una gran estirada de Ochoa.
Alexis Vega y “Chucky” amenazaron
En un duelo áspero, México elaboró, propuso y utilizó bien sus recursos, con Luis Chávez y Alexis Vega en un poderoso flanco izquierdo del ataque y el “Chucky” buscándose la vida como podía en el derecho.
Del “Tri” fueron prácticamente todas las ocasiones, con Héctor Moreno rematando alto un centro desde la izquierda.
Luego el otro Héctor, Herrera, irrumpió por la misma banda y su centro templado lo remató con el hombro Alexis Vega. El balón salió lamiendo uno de los postes.
México parecía encontrar el camino y Luis Chávez sirvió con magisterio al espacio para que Jesús Gallardo se enredara con el arquero Wojciech Szczesny. El lateral izquierdo estuvo a punto de salir ganador.
A falta de trabajo, Ochoa, con el brazalete de capitán en su quinta Justa Mundialista, aprovechaba cuando hacía circular el balón para pedir calma a los suyos, ansiosos sobre todo en los primeros compases.
Buen despliegue defensivo
Por su parte, Polonia, cuyo seleccionador Czeslaw Michniewicz ya había avisado que el juego de su equipo se basaba en la practicidad, intentó llegar con un pelotazo o combinando, según lo demandara el momento.
Pero el objetivo era claro, que Lewandowski recibiera lo más cerca del área posible. El “Tri” tenía bien estudiada la lección y ahogó a la estrella del Barcelona, con la ayuda de Héctor Herrera, que descendía unos metros para auxiliar a su zaga.
Así el “Tri” se fue al descanso con más posesión, más precisión en los pases y más tiros que Polonia, pero sin acertar.
Tras el penal atajado por Ochoa, los jugadores mexicanos retomaron la conquista, impulsados por los suyos, que gritaban “¡Memo, Memo!” y “¡Sí se puede!”.
En la última media hora del juego, la mejor ocasión la tuvo Edson Álvarez con un disparo que peinó Henry Martín.