Cuidar la piel es igual de importante que cuidar otra parte del cuerpo. En temporada invernal, de acuerdo con especialistas de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD), no tener un adecuado cuidado de la piel puede ocasionar lesiones.
La escasa humedad, el calor seco de los calentadores y exponerse a cambios bruscos de temperatura son algunos de los factores que pueden desencadenar síntomas o agravar algunas enfermedades de la piel.
Rossana Llergo Valdez, presidenta de la FMD, señaló a Once Noticias que la resequedad en la piel es uno de los primeros síntomas que se presenta en la estación invernal, pero también aparecen otros.
“Las pieles atópicas o en los extremos de la vida tienen mayor sensibilidad y son más susceptibles a desarrollar lesiones que pueden expresarse en la piel como enrojecimiento, descamación, comezón e incluso fisuras, con una afectación variable de superficie corporal dependiendo de la severidad”, dijo al medio.
Susana Canalizo, vicepresidenta de esta Fundación, resaltó al medio que en invierno existe un incremento de las dermatitis atópicas en infantes: aparecen lesiones rojas que provocan comezón en los pliegues de los codos, rodillas o las mejillas.
Otro de los padecimientos que pueden observarse en temporada de frío es la xerosis o resequedad, asociada a los efectos secundarios de tratamientos que se prescriben para tratar el acné, comparte la directora de la FMD.
Llergo compartió que el aumento en las dermatitis como consecuencia del frio ocasiona que también haya un incremento en las consultas dermatológicas, por lo que resaltó la importancia de acudir con especialistas.
“Es importante acudir al dermatólogo para limitar los efectos no deseados e incómodos de tu tratamiento y se pueda continuar con el manejo sin suspenderlo, pues la adherencia al tratamiento es fundamental para los buenos resultados y el control del padecimiento”, añadió en la entrevista con Once Noticias.
Con la temporada invernal llegan otras molestias como labios partidos, queilitis angular también llamadas “boqueras”, piel roja en mejillas y nariz rosácea, manos secas que con frecuencia se fisuran, inflamación y comezón.
Ante esto, Llego Valdez, dijo que es necesario aplicar bálsamos labiales, crema humectante en cara y manos. La aplicación de crema en las manos debe incrementarse en la temporada invernal.
“La cara y las manos son las partes más expuestas a las bajas temperaturas por lo que deben humectarse con crema diariamente y reaplicar crema posterior a cada lavado de manos”, agregó la directora de FMD.
La especialista recordó que el protector solar debe aplicarse siempre, posterior a humectar la piel, aún cuando estemos en interiores o en días nublados. Dijo que su utilización es fundamental también en lugares como la playa o sitios nevados, porque existe el riesgo de quemaduras solares en la piel.
Finalmente recomendó que se debe acudir de forma periódica con el dermatólogo “para aprender a cuidar al órgano más grande de nuestro cuerpo, el cual cambia y presenta requerimientos diferentes en cada etapa de la vida”, finalizó.