Aunque la Norma Oficial Mexicana sobre bebidas alcohólicas dispone que la única materia prima permitida para la fabricación de estas bebidas debe ser el alcohol etílico de origen vegetal, a lo largo y ancho del país se han identificado productos de origen informal que para su elaboración han utilizado como materia principal al metanol, el cual es un tipo de alcohol muy tóxico, que se produce industrialmente y que puede ser añadido como un sustituto del alcohol etílico para adulterar las bebidas alcohólicas.
También han sido identificadas otras sustancias tóxicas como el propanol, el etilenglicol, los aldehídos, entre otras, por lo que adquirir bebidas alcohólicas en lugares no establecidos, puede generar costos que sobrepasan los económicos y en el extremo, podrían costar la vida.
“El consumo de alcohol adulterado puede generar ceguera o la muerte”, aseguró Jorge Guerrero, Técnico analista de la Cofepris.
El Once realizó un recorrido en algunos tianguis en los que se vende alcohol, por ejemplo, una botella que en un establecimiento formal cuesta 600 pesos, en el comercio informal se vende en 280.
Ante esta situación, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), refuerza su trabajo de análisis y vigilancia. La dependencia recordó a la población que comprar bebidas en lugares no establecidos dentro de la legalidad es sumamente riesgoso, pues no pasan por procesos de análisis.
“En este caso, tomamos nuestra muestra, vamos a tomar nuestra muestra en un matraz volumétrico de 250 mililitros. La vertimos. Ya que tenemos vertida la muestra. Y se procede a colocarlo en la mantilla de calentamiento, para su proceso de destilación”, explicó Jorge Guerrero, técnico analista de la Cofepris.
Después se analiza la constitución de los elementos en las bebidas.
“Vamos a poder identificar qué compuestos tiene, por ejemplo, aquí podemos ver esta señal que está aquí, es el etanol que tiene la muestra, aquí podríamos ver que no contiene metanol la muestra. Una muestra adulterada como comentaba hace unos minutos, se observaría otros componentes distintos a los que comúnmente estamos identificando”, detalló José Antonio Sánchez, coordinador del área de análisis de bebidas de la Cofepris.
Recomendaciones para evitar adquirir bebidas alcohólicas adulteradas
No compre bebidas alcohólicas:
- De bajo o muy bajo precio.
- De marcas desconocidas.
- Que la etiqueta no cumpla con los requisitos obligatorios:
a) Porcentaje de contenido alcohólico;
b) Símbolos de prohibición (conducción de vehículos bajo el consumo de alcohol, consumo en menores de 18 años y consumo en mujeres embarazadas);
c) Cantidad;
d) Lote;
e) Fecha de consumo preferente;
f) Nombre o razón social del productor;
g) Nombre o denominación genérica;
h) País de origen y
g) Leyenda precautoria.
- Adquiridas en el mercado ilegal o informal (tianguis, tendidos, casas sin registro de venta) o en lugares que son desconocidos para usted.
- Artesanales, a granel o en presentaciones mayores de un litro.
- Con etiquetas en mal estado (quemadas, desgastadas, despegadas) o botellas desgastadas, ralladas y sucias, lo que puede sugerir que son botellas reutilizadas.
- Con huellas de violación en las tapas (cintilla rota o botella abierta), o fugas en la tapa al poner la botella boca abajo.
- Con partículas o residuos sólidos visibles a trasluz dentro de la botella.
- Sin etiqueta o sello del Sistema de Administración Tributaria (SAT), o con sellos que no cumplen las medidas de seguridad (relieve o tintas que reflejan diferentes colores).
A través del sello, en las botellas se puede corroborar que la bebida alcohólica que se está adquiriendo sea del mercado formal, y también permite corroborar si la bebida es auténtica.
Con una aplicación (app) para lectura de códigos QR se pueden ver los datos del producto (como cantidad y tipo de bebida) así como del productor (razón social y lote).
La Cofepris mantiene operativos de vigilancia, y en caso de detectar irregularidades, lleva a cabo aseguramientos o clausura del establecimiento donde se comercialicen bebidas adulteradas.
Síntomas de riesgo
Si consumió o cree haber consumido alguna bebida alcohólica adulterada, puede presentar alguno o varios de los siguientes síntomas en las 48 horas después de haberla ingerido:
- Dolor de cabeza (principalmente del tipo punzante)
- Vómitos
- Dolor abdominal
- Sueño excesivo
- Mareo
- Vértigo
- Visión borrosa
- Molestia excesiva provocada por la luz
- Percepción de colores alrededor de los objetos
- Incoordinación motora
- Dificultad para respirar
- Convulsiones