Al menos 4 mil 815 menores sufrieron abusos sexuales por parte de miembros del clero católico en Portugal desde 1950, según una comisión independiente que presentó sus conclusiones este lunes tras haber recabado más de 500 testimonios.
“Estos testimonios nos permiten llegar a una red de víctimas mucho mayor, calculada en un número mínimo de 4.815 víctimas”, dijo el coordinador de esta comisión de expertos, el psiquiatra infantil Pedro Strecht, en la presentación de su informe final en Lisboa.
La comisión, integrada por seis expertos liderados desde hace más de un año por el pedopsiquiatra Pedro Strecht, recopiló 424 testimonios, aunque el número total de víctimas es “mucho mayor”.
Los hechos denunciados revelaban situaciones graves que persistieron durante décadas, que se hacen más evidentes cuanto más se retrocede en el tiempo y que, en algunos lugares, adquirieron proporciones verdaderamente endémicas concluyó el equipo en octubre, durante un primer balance.
La mayoría de los crímenes denunciados han prescrito, pero unas veinte acusaciones fueron transmitidas a las autoridades judiciales, que abrieron investigaciones.
Es el caso de Alexandra, el segundo nombre de una mujer de 43 años que prefiere permanecer en el anonimato, fue violada por un sacerdote cuando se preparaba para la vida de monja a los 17 años.
“Es muy difícil hablar del tema en Portugal, un país en el que 80% de la población se define como católica”, explica esta madre de familia, que trabaja como auxiliar de cocina.
Asimismo, comentó que llevaba muchos años guardando este secreto, pero que “sentía que era cada vez más difícil gestionar eso sola”.