Reino Unido y Estados Unidos anunciaron este jueves nuevas sanciones contra los intereses financieros de la junta militar que dio un Golpe de Estado en Myanmar en febrero.
En este caso, las sanciones fueron contra dos conglomerados industriales propiedad de los militares.
Las sanciones de hoy tienen por objetivo intereses financieros del ejército, con el fin de cortar las fuentes de financiación de sus campañas de represión contra los civiles”, comentó el ministro británico de Relaciones Exteriores, Dominic Raab.
Además, acusó al grupo Myanmar Economic Holdings (MEHL), propiedad de antiguos y actuales militares, de estar implicado en graves violaciones de los derechos humanos al financiar la campaña de limpieza étnica de las fuerzas armadas contra la minoría rohinyá en 2017.
Por su parte, Washington anunció sanciones contra otro conglomerado de propiedad militar, Myanmar Economic Corporation.
Los militares controlan partes significativas de la economía del país a través de estas dos corporaciones, en particular en los sectores del comercio, los recursos naturales, el alcohol, los cigarrillos y los bienes de consumo”, señaló el Tesoro de Estados Unidos.
Reino Unido anunció hace algunos días sanciones contra más de 20 responsables birmanos, civiles y militares, entre ellos el comandante en jefe del ejército, Min Aung Hlaing, por graves violaciones de los derechos humanos y su papel en el Golpe de Estado militar.
Al menos 286 civiles murieron en la represión de las manifestaciones que se celebran prácticamente cada día desde el Golpe de Estado del 1 de febrero que derrocó el Gobierno civil de Aung San Suu Kyi, según la Asociación de Ayuda a los Presos Políticos (AAPP).