El ejército de Ucrania lanzó una nueva ofensiva para tratar de recuperar la ciudad de Bajmut, al este de ese país, ocupada por soldados rusos.
“Estamos cercando Bajmut, expulsando a los rusos para que nuestras fuerzas puedan entrar allí y alcanzar la ciudad”, dijo Volyna, comandante del ejercito ucraniano.
Ante este despliegue militar ucraniano, en Moscú, el presidente ruso, Vladimir Putin, trató de minimizar las acciones de la ofensiva de Ucrania asegurando que no han tenido éxito.
“Todos los intentos del enemigo de romper nuestras defensas (…) fueron infructuosos a lo largo de la ofensiva. El enemigo no ha tenido éxito”, declaró Putin en una entrevista con el canal de televisión Rossia-1 emitida el domingo.
El mandatario estimó también que la situación era “positiva” para las fuerzas rusas.
“Nuestras tropas están actuando de forma heroica. Y de manera inesperada para el adversario, están incluso pasando a la ofensiva en ciertos sectores y capturando posiciones más ventajosas”, afirmó Putin.
Ucrania lanzó su esperada contraofensiva el pasado mes, tras acumular ingente material armamentístico de Occidente y reforzar sus capacidades de ataque.
La contraofensiva de Kiev avanza despacio frente a unas tropas rusas que tuvieron tiempo de establecer defensas sólidas, que incluyen campos infestados de minas, y siguen disponiendo de una importante potencia de fuego para atacar a las fuerzas ucranianas.
Este domingo, el Estado Mayor ucraniano afirmó que había operaciones ofensivas en curso en dirección de Melitópol y Berdiansk, dos ciudades ocupadas por Rusia en el sur de Ucrania.
El martes pasado, el ministro ruso de Defensa afirmó que sus tropas habían logrado avanzar un kilómetro y medio en un sector del frente situado cerca de Limán, en la región de Donetsk, en el este de Ucrania.