Un informe de varias agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pone de manifiesto que casi el 40% de los migrantes y refugiados venezolanos han sido desalojados durante la pandemia, mientras que el 38% está en riesgo de perder su hogar en su país de acogida.
El documento, además señala que la mayoría de ellos no ha recibido ninguna ayuda de los Gobiernos antes o después del desalojo y que tres de cada cuatro hogares desalojados están enfrentando nuevos riesgos de desalojo.
También advierte de que una quinta parte de las personas afectadas son embarazadas o madres de niñas y niños.
La situación de los migrantes en América Latina y el Caribe se ha visto empeorada con la crisis sanitaria provocada por el Covid-19, ya que la mayoría de ellos dependen de trabajos informales, que han perdido con las restricciones para frenar la expansión de la enfermedad.
En este contexto, se encuentran viviendo en situación de pobreza, sin poder cubrir sus necesidades básicas.
Colombia es el país con mayor número de casos en los que se ha notificado del desalojo a los hogares encuestados con un 69.50%, seguido por Brasil con un 59%, Ecuador con un 58.4% y Perú con un 55.7%.
El estudio recoge las encuestas realizadas en siete países de América Latina y del Caribe y refleja que la mitad de los hogares entrevistados viven en una sola habitación.
Además, revela que el 11% de todos los desalojos resultaron en indigencia y que, si fueran desalojados, tres de cada cuatro de los hogares caerían en indigencia.
No solo las personas que se ven abocadas a la indigencia tienen más peligro de contagiarse con el Covid-19, además de otros riesgos sanitarios, sino que también se enfrentan a la estigmatización y al riesgo de ser explotadas y abusadas laboral y sexualmente.
Ante esta situación, la necesidad de garantizar políticas públicas para el acceso a la vivienda como paso siguiente a los esfuerzos en regularización es clave si queremos evitar que sigan aconteciendo situaciones tan dramáticas como las que hemos observado en este último año”, comentó el representante especial conjunto para los Refugiados y Migrantes Venezolanos, Eduardo Stein.