La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), luego de nueve años determinó que la minera propiedad de Grupo México derramó 40 millones de litros de sulfato de cobre acidulado en los ríos Sonora y Bacanuchi lo que contaminó de manera crónica el aire, suelo y agua.
En un comunicado, la dependencia federal dio a conocer el dictamen-diagnóstico ambiental e informó que Grupo México adeuda más de 20 mil 508 millones de pesos, cantidad económica que se ha negado a pagar.
Por su parte la Semarnat calificó el derrame químico como “el desastre ambiental más grave de la minería en la historia de México”.
El director general del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, Adrián Pedrozo, explicó que los estudios de la calidad del agua superficial y subterránea confirmaron que el derrame “se debió a un mal diseño del sistema de Lixiviados Tinajas 1”.
Tras casi una década del incidente, prevalecen concentraciones de metales pesados en los ríos por arriba de los niveles recomendados, además de un acaparamiento y sobreexplotación de 59.7% de acuíferos en la zona, atribuible a la actividad minera.
La secretaria Medio Ambiente María Luisa Albores, reiteró que la Semarnat continuará atendiendo esta problemática en la que prevalece la falta de justicia y remediación ambiental para los pobladores de esa región.