Cientos de manifestantes intentaron entrar en la embajada de Israel en Ammán, capital de Jordania, para protestar por el reciente ataque un hospital en Gaza.
Atribuido a Israel por el movimiento islamista Hamás, el ataque fue condenado por cientos de manifestantes que, de acuerdo con videos difundidos en redes sociales, se reunieron afuera de la embajada de Israel y saltaron la barrera del inmueble.
Al avanzar hacia el complejo de la embajada, las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos contra los manifestantes para dispersarlos.
Por su parte, el ministerio de Relaciones Exteriores de Jordania condenó el lanzamiento del cohete que alcanzó al hospital en Gaza, y atribuyó la responsabilidad de este grave evento a Israel, “la fuerza ocupante”, señaló el ministerio en un comunicado de prensa.
Israel acusa a la Yihad Islámica de estar detrás del cohete que mató al menos a 200 personas, según las autoridades locales.
En tanto, el ministerio de Salud de ese territorio palestino, gobernado por el movimiento islamista Hamás, mencionó que entre “200 a 300 mártires” perecieron en el bombardeo del hospital Ahli Arab, y “centenas de personas se hallan bajo los escombros”.
La oficina de comunicación de las autoridades del enclave denunciaron un “crimen de guerra”.
“El hospital albergaba a centenas de enfermos y heridos, así como a personas desplazadas por la fuerza a causa de los bombardeos”, señaló el comunicado.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, declaró un duelo de tres días en los territorios palestinos.
Unas tres mil personas murieron en los bombardeos israelíes de la Franja de Gaza en el marco de las represalias adoptadas tras la incursión el 7 de octubre de centenares de milicianos islamistas que mataron a unas mil 400 personas y secuestraron a cerca de 200.