El Gobierno de Reino Unido anunció que impondrá, a partir de la próxima semana, la obligación de presentar una PCR negativa de coronavirus a los viajeros que entren a Inglaterra, incluidos los ciudadanos británicos.
Londres se suma así a esta estrategia adoptada por otros países europeos, incluida España.
Ya hemos puesto en marcha medidas para evitar casos importados de la Covid-19, pero ante la aparición de nuevas cepas del virus en otras partes del mundo, hemos de adoptar más medidas de precaución”, dijo el ministro de Transportes, Grant Shapps.
A pesar de que, la variante mayoritaria en el alarmante incremento de infecciones que sufre el país es la denominada “cepa británica”, originada en el sur y sureste de Inglaterra, los expertos del Gobierno han detectado ya varios casos de llamada variante surafricana.
Es precisamente esta cepa la que ha hecho surgir más dudas a los científicos sobre la eficacia de las vacunas que han comenzado a suministrarse a la población.
A partir del lunes, toda persona que quiera viajar a Inglaterra deberá presentar una PCR negativa realizada durante un máximo de 72 horas antes del viaje.
Los que incumplan con la medida se enfrentan a multas de hasta 550 euros.
Los viajes al Reino Unido desde el resto del mundo se han paralizado prácticamente desde que el Gobierno de Johnson impuso, el miércoles pasado, un nuevo confinamiento nacional de extrema severidad, que incluye el cierre de colegios, universidades, comercios, hostelería y lugares de ocio.
Los ciudadanos deben permanecer en sus casas, salvo para realizar tareas muy específicas y necesarias.
Este jueves, Londres registró 52 mil 618 casos más de personas infectadas, y la cifra de fallecidos fue de mil 162.
La situación en muchos de los hospitales y el sur de Inglaterra está ya al borde del colapso, con cifras de hospitalizados por Covid-19 un 30% superiores a las que se registraron en abril, durante la primera ola.