Investigadores del departamento de Química y Farmacología Médica de la Universidad de Barcelona (UB) han desarrollado un nuevo compuesto que, probado en ratones, reduce la inflamación de las neuronas cerebrales y mejora la cognición.
El nuevo fármaco, que publica la revista Geroscience, pertenece a una familia de moléculas que al unirse a los receptores imidazólicos I2 provocan una reducción de la neuroinflamación y una mejora de la cognición y de otros marcadores de la progresión del Alzheimer, la enfermedad más prevalente entre las demencias.
Según los investigadores, este estudio preclínico abre la puerta a desarrollar nuevas terapias contra el Alzheimer, una enfermedad que todavía no tiene cura, y también contra otras patologías neurodegenerativas.
El trabajo lo han llevado a cabo dos equipos de investigación de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación de la UB, liderados por Mercè Pallàs, miembro del Instituto de Neurociencias (UBNeuro), y Carmen Escolano, del Instituto de Biomedicina de la UB (IBUB).
El nuevo compuesto presenta una alta afinidad y selectividad respecto a los receptores imidazólicos I2, que se encuentran en diferentes órganos y participan en múltiples procesos fisiológicos.
Estudios previos de este grupo de investigación había demostrado el efecto positivo de esta familia de compuestos en la evolución del Alzheimer.