Nave Starliner regresa a la Tierra, pero sin sus astronautas a bordo
La cápsula Starliner, de Boeing, comenzó su regreso a la Tierra tras su separación de la Estación Espacial Internacional.
La cápsula Starliner del gigante aeronáutico Boeing se separó este viernes de la Estación Espacial Internacional (EEI) para iniciar su regreso a la Tierra, pero sin los dos astronautas que transportaba en el vuelo de ida, debido a preocupaciones sobre la seguridad de la aeronave.
“Separación confirmada. Starliner se aleja ahora de la estación e inicia su regreso a la Tierra”, dijo un locutor en la transmisión en directo de la NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio) a las 22H04 GMT.
Está previsto que la nave aterrice en una base de Nuevo México, en el suroeste de Estados Unidos, a las 04H03 GMT del sábado.
La reputación del fabricante aeroespacial estadounidense, ya cuestionada por numerosos problemas recientes con sus aviones de pasajeros, sufrió un nuevo golpe en junio, cuando se detectaron fallos en los propulsores y fugas de helio en la Starliner durante el vuelo tripulado inaugural.
A pesar de los intentos de Boeing por convencer a la NASA de la seguridad de sus aeronaves, la agencia espacial de Estados Unidos prefirió enviar a sus tripulantes, Butch Wilmore y Suni Williams, de regreso a casa, a través de su competidor, SpaceX y su cápsula Crew Dragon.
LIVE: #Starliner departs from the @Space_Station. The uncrewed @BoeingSpace spacecraft is scheduled to autonomously undock at approximately 6:04pm ET (2204 UTC), with landing at White Sands Space Harbor in New Mexico targeted for about six hours later: https://t.co/aXgGF0gVqc
— NASA (@NASA) September 6, 2024
Los dos astronautas, cuya misión original era de ocho días, permanecerán en el espacio más de ocho meses y no regresarán hasta el año que viene.
Steve Stich, responsable del programa de vuelos espaciales tripulados comerciales de la NASA, aseguró esta semana a la prensa que, a pesar de la confianza de Boeing sobre sus proyecciones, la agencia espacial “no se sentía cómoda” procediendo con Starliner “debido a la incertidumbre en torno al diseño“.
Durante el trayecto de regreso, los equipos en tierra deben supervisar todos los aspectos del rendimiento del Starliner durante el impulso de órbita que le permitirá volver a entrar en la atmósfera terrestre.
Una vez concretado el regreso, “sabremos mejor cuándo podremos certificar la nave y cuándo podremos reanudar los vuelos“, zanjó Stich.