El próximo domingo 22 septiembre, tras un trabajo de renovación sin precedentes en su infraestructura y museografía, reabrirá sus puertas el Museo de Sitio de Palenque (Musipa) “Alberto Ruz L’huillier”, ubicado en la zona arqueológica icónica de esta localidad chiapaneca.
Así lo anunció el director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, al acompañar al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y a la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, en la conmemoración del bicentenario de Chiapas.
“Hace 200 años, las y los chiapanecos decidieron por voluntad propia ser mexicanos, cuando se discutía la primera constitución federal de nuestro país, una vez que se había venido abajo el mal logrado imperio de Agustín de Iturbide, Chiapas decide incorporarse y buscar con México el camino de la libertad, la justicia, la ley y la fraternidad”, recordó el titular del INAH.
Durante la ceremonia, realizada en Palenque, el antropólogo señaló que la antigua urbe, investigada extensivamente por especialistas del Instituto, dependencia de la Secretaría de Cultura federal, es evidencia de una próspera comunidad cuyos vestigios se remontan, al menos, al año 400 antes de Cristo (a. C.).
“Sus edificios únicos, extensas inscripciones y la tumba de Pakal ‘el Grande’, la primera construcción funeraria encontrada dentro de un basamento piramidal maya, le han convertido en un sitio excepcional e imprescindible para entender la historia de este ancestral pueblo”, explicó.
La renovación de este sitio formó parte de los trabajos del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), vinculado con el Tren Maya.
Palenque no pasa inadvertido
Palenque recibió su nombre de la pequeña comunidad virreinal de Santo Domingo de Palenque, ubicada a 8 kilómetros del sitio precolombino, sin embargo, los estudios epigráficos han revelado que su antiguo nombre era Lakamha’, “el lugar de las grandes aguas”, posiblemente alusivo a los arroyos Murciélagos, Otulúm y Picota, que caen en cascadas por las laderas del sitio.
Lakamha’ estuvo ocupada por más de 12 siglos, hasta sucumbir durante el colapso del periodo Clásico maya, alrededor del año 800 d.C.
A la fecha, en el sitio se han identificado más de mil 500 estructuras arqueológicas en una superficie de más de 16 kilómetros cuadrados, agrupadas en plazas y barrios; su elaborado urbanismo, además, denota una desarrollada agricultura intensiva, sustentada en la milpa maya.
El núcleo del asentamiento está dominado por un magnífico recinto conocido como el Palacio, adyacente al cual se encuentran un juego de pelota y números basamentos, incluido el Templo de las Inscripciones, donde el arqueólogo mexicano Alberto Ruz L’huillier encontró, en 1952, la tumba de K’inich Janaab’ Pakal, jerarca que reinó entre los años 615 y 683 de nuestra era.
“Palenque no puede pasar inadvertido para ningún estudioso o interesado en la cultura maya”, prosiguió el antropólogo, Diego Prieto.
Para Alfred Maudslay, se trata de “la reina de las ciudades mayas“, para Alberto Ruz, “la razón principal de sus investigaciones”; y para el presidente Andrés Manuel López Obrador, “su próxima casa”.