
El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) colocó un implante neuroestimulador cerebral, que beneficia a pacientes que presentan rigidez y lentitud del movimiento, esto sucedió en el marco del Día Mundial del Parkinson.
Este tratamiento, que se realiza en el Centro Médico Nacional (CMN) 20 de Noviembre, es para las personas que lo requieran y que cumplen con los requisitos para recibirlos.
De acuerdo con la directora del CMN 20 de Noviembre del ISSSTE, Lecsy Macedo Calvillo, del 2024 a la fecha se han implantado 22 neuroestimuladores a quienes tienen mayor posibilidad de obtener beneficios y responder de forma positiva al procedimiento.
De acuerdo con los especialistas la cirugía no es curativa, solo ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas, y no todos los pacientes son candidatos a esta intervención, porque requieren de una valoración completa por neurología, psiquiatría, psicología y anestesiología para poder acceder a este.
El coordinador médico de la Clínica Especializada San Fernando del ISSSTE, Ixtayul Leopoldo Aldama Santos, explicó que los neuroestimuladores se colocan con la persona despierta, modulando la intensidad de descargas eléctricas en los núcleos neuronales, principalmente en el globo pálido interno, y para verificar que efectivamente facilitan el proceso de inicio, organización y ejecución del movimiento en el paciente.
Dijo que el Parkinson ocupa en el país el segundo lugar dentro de los padecimientos neurodegenerativos, y afecta aproximadamente a 500 mil personas, de entre los 45 y 60 años.
Por ello, comentó que es importante tomar conciencia sobre esta enfermedad, cuyos síntomas se caracterizan por padecer temblor en las manos, los brazos, las piernas, la mandíbula y la cara; rigidez en los brazos, las piernas y el tronco; lentitud de los movimientos; problemas de equilibrio y coordinación.
“Es muy importante conocer los síntomas, qué podemos hacer para la prevención, qué tratamientos están disponibles y el impacto que se genera en la calidad de vida de las personas que la tienen, y su familia, para resaltar la importancia de la investigación y el apoyo a través de la comunidad”, explicó Aldama Santos.
Recomendó que cuando una persona tiene sospecha de padecer Parkinson, debe acudir a su unidad de medicina familiar, donde se realiza un abordaje de primera instancia, y el médico inicia el manejo de la enfermedad y comienza el proceso de referencia a las clínicas correspondientes para la atención.