
Al cierre de junio, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), registró 61.8 millones de personas en la población económicamente activa (PEA), lo que significó un incremento de 1.2 millones más que en junio de 2024.
La tasa de desempleo que mide mensualmente el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), se ubicó en 2.7 por ciento de la población económicamente activa, lo que significó un descenso de una décima de punto porcentual con relación al mismo mes de 2024, cuando se ubicaba en 2.8 por ciento.
La tasa de subocupación (porcentaje de población ocupada que buscó ofertar una mayor cantidad de tiempo de trabajo en su ocupación actual o en un empleo adicional), se estableció en 7.4 por ciento, con una reducción de una décima de punto sobre 7.5 por ciento de junio de 2024.
La tasa de condiciones críticas de ocupación, que representa la precariedad laboral fue de 32.7 por ciento y representó una mejoría sustancial en el año, pues en el sexto mes de 2024 se ubicaba en 37.7 por ciento.
Por su parte, la tasa de informalidad laboral se ubicó en 54.8 por ciento, con un ligero aumento sobre 53.8 por ciento del mismo mes del año pasado.