
En Nueva York, Estados Unidos, una corazonada logró que un caso de secuestro infantil fuera resuelto.
La pequeña Paislee Shultis, desaparecida en 2019 en el condado de Tompkins, cuando tenía cuatro años, fue hallada en un cuarto secreto de la casa del abuelo paterno, en Saugerties, a 265 kilómetros de distancia.
La policía la buscó siguiendo como pista principal que sus padres biológicos la escondieron al perder su custodia y la de su hermana mayor, quien sí fue entregada a un tutor.
Sí, eso es lo que creímos todo el tiempo, que de alguna manera habían construido algo donde podían esconder a la niña, y ese fue el caso”, señaló Joseph Sinagra, jefe del Departamento de Policía de Saugerties, NY.
Los oficiales indagaron cada rincón del lugar. El detective Field examinó cada escalón y fue entonces que vio una manta a través de una grieta en esa parte de la casa.
El detective Eric Field subió y bajó la escalera varias veces durante la búsqueda y dijo que había algo en los escalones que estaba mal. No se sentían bien […] Comenzaron a quitar los escalones y finalmente vieron un par de pequeños pies. Cuando sacaron más tablas, encontraron a la niña Paislee y a su madre biológica, Kimberly Cooper, escondidas en ese lugar”, informó Joseph Sinagra, jefe del Departamento de Policía de Saugerties, NY.
La menor fue trasladada a la Comisaría local, donde un médico determinó que estaba en buenas condiciones.
Ahora, los padres biológicos y el abuelo enfrentan cargos de interferencia de la custodia y por poner en peligro el bienestar de la menor.