Perseverance confirma que cráter Jezero de Marte fue un lago tranquilo
El primer análisis científico de las imágenes tomadas por el rover Perseverance de la NASA ha confirmado que el cráter Jezero de Marte, fue alguna vez un lago tranquilo.
Lo que hoy es una depresión seca y erosionada por el viento estuvo alimentado constantemente por un pequeño río hace unos 3 mil 700 millones de años, según publica el equipo de la misión en la revista ‘Science’.
Las imágenes también revelan pruebas de que el cráter sufrió inundaciones repentinas que fueron lo suficientemente enérgicas como para arrastrar grandes rocas desde decenas de kilómetros río arriba y depositarlas en el lecho del lago, donde hoy se encuentran las enormes rocas
El nuevo análisis se basa en imágenes de las rocas que afloran en el interior del cráter en su lado occidental. Anteriormente, los satélites habían mostrado que este afloramiento, visto desde arriba, se asemejaba a los deltas de los ríos en la Tierra, donde las capas de sedimentos se depositan en forma de abanico a medida que el río se alimenta de un lago.
Si miras estas imágenes, básicamente estás viendo este épico paisaje desértico. Es el lugar más desolado que se pueda visitar –dice en un comunicado Benjamin Weiss, profesor de ciencias planetarias en el Departamento de Ciencias de la Tierra, Atmosféricas y Planetarias del MIT y miembro del equipo de análisis–.
No hay ni una gota de agua en ninguna parte y, sin embargo, aquí tenemos pruebas de un pasado muy diferente. Algo muy profundo ocurrió en la historia del planeta”.
A medida que el rover explore el cráter, los científicos esperan descubrir más pistas sobre su evolución climática. Ahora que han confirmado que el cráter fue en su día un entorno lacustre, creen que sus sedimentos podrían contener rastros de antigua vida acuática. En su misión futura, el ‘Perseverance’ buscará lugares para recoger y conservar sedimentos. Estas muestras se devolverán a la Tierra, donde los científicos podrán analizarlas en busca de biofirmas marcianas.
Durante este tiempo, dos de las cámaras del ‘Perseverance’, la Mastcam-Z y la SuperCam Remote Micro-Imager (RMI), capturaron imágenes de su entorno, incluyendo fotos de larga distancia del borde del afloramiento y de una formación conocida como Kodiak butte, un afloramiento más pequeño que los geólogos planetarios suponen que pudo estar conectado al afloramiento principal en forma de abanico pero que se ha erosionado parcialmente.
Sin llegar a ningún sitio, el rover pudo resolver una de las grandes incógnitas, que era que este cráter fue una vez un lago –resalta Weiss–. Hasta que realmente aterrizamos allí y confirmamos que era un lago, siempre fue una incógnita”.