El juez que encabeza el juicio a 10 personas acusadas de delitos financieros en el Vaticano, incluido un cardenal, ordenó que la Fiscalía entregue más acceso a la evidencia a la defensa y que interrogue a los acusados a los que no se les dio el derecho a hablar previamente.
El presidente de la Corte, Giuseppe Pignatone respondió a una sorpresiva oferta que hizo la Fiscalía el martes, en la que reconoció debilidades en su caso y dijo que estaba dispuesta a regresar a la etapa de investigación para llenar vacíos cuestionados por la defensa.
El juicio gira principalmente en torno a la compra de un edificio comercial y residencial por parte de la Secretaría de Estado del Vaticano en el número 60 de Sloane Avenue en el distrito South Kensington de Londres, uno de los más ricos de la capital británica.
Pignatone ordenó a la Fiscalía que le diera a la defensa acceso a la documentación restante, evidencia, videos de interrogatorios y otro material antes del 3 de noviembre y aplazó el juicio hasta el 17 de noviembre.
Los abogados de la defensa dijeron que estaban contentos con la decisión y aseguraron que presionarían a la Fiscalía para que interrogue a sus clientes sobre temas que no estaban cubiertos antes de que se dictara una acusación formal el 3 de julio.
Al fijar una fecha para la reanudación del juicio, Pignatone rechazó efectivamente una solicitud de la defensa para anular la acusación de 500 páginas, lo que habría acabado con el juicio actual.