En México, se estima que cinco mil personas tienen la afectación de osteogénesis imperfecta. Una carencia de colágeno en el tejido que provoca huesos frágiles.
El doctor de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Christopher Torres, estableció una colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid, en España, para crear estas sillitas.
Estas sillas, dijo, estarían dirigidas a las y los menores que padecen esta enfermedad, ya que en 50% de los accidentes vehiculares están involucrados menores de edad. De esta forma surgió este prototipo mexicano que está patentado, el cual cuenta con un sistema de retención infantil.
En la base de la silla, agregó, tiene un sistema de contención y distribución del impacto, esto está hecho a base de amortiguadores y resortes que en milisegundo aminoran el cambio brusco de velocidad.
Además, detalló, el dispositivo tienen 3 grados de libertad, es decir tiene movimiento en los tres ejes principales, incluyendo también, puede absorber impactos frontales, laterales u oblícuos, en cualquier dirección que haya un impacto distribuye toda la energía, a través de estos elementos mecánicos
“Un choque a diez, quince kilómetros por hora puede dañar la parte de la columna, se llama el efecto latigazo. Entonces esa es la parte más importante, la protección de obviamente y principalmente de los infantes”, declaró Juan Alejandro Flores Campos, académico de la UPIITA, IPN.
El prototipo está en proceso de compactar las piezas previo a buscar alguna alianza para comercializarlo.
Por el momento, indican los investigadores, el sistema funciona y se han realizado diversos estudios para medir la excursión y aceleración que experimentaría el cuerpo del infante en un choque automovilístico.