La Escuela Superior de Cómputo (ESCOM) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), en colaboración con el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), desarrolló un Sensor Urbano Inteligente Móvil que monitorea la calidad del aire al instalarse en el techo de vehículos ya sea de transporte público o privado.
“Es un sensor el cual se encarga de realizar mediciones en tiempo real a una escala racional, a nuestra escala, no como el sistema de monitoreo ambiental de Ciudad de México que se encuentra con estaciones a gran altitud que nos da una idea general de la región. En este caso, es una idea general de nuestro entorno a cinco o 10 metros a la redonda”, explicó el egresado de la ESCOM, Ángel Alexandro Ruíz Enríquez.
La innovación de este invento consiste en que se generan coordenadas de posicionamiento en tiempo real, para la recolección de datos, que contribuirían a la elaboración de políticas públicas para la protección de la salud de la población.
El dispositivo está conformado por tres módulos:
- Primer módulo se encarga de toda la parte de energía: recolección de energía a través de paneles solares, la almacena en batería y alimenta todos los demás componentes
- Segundo módulo es el controlador o el cerebro del dispositivo: almacena todos los datos, procesa y luego envía en este caso a un servidor o a una memoria interna
- Tercer módulo se encarga de la recolección de datos, la cual tiene la conexión con todos los demás sensores que se encargan de medir la calidad del aire.

Este sensor se coloca en el techo de los vehículos, ya sean autobuses de transporte público o autos particulares, y durante los recorridos, el dispositivo envía los datos a un servidor, por lo que también se diseñó un programa que analiza los datos sobre zonas y horarios con mayor concentración de contaminación.
Asimismo, este sensor está inspirado en uno desarrollado por el MIT, pero se adaptó para que funcionara en la capital.
“Cuando ellos lo trataron de probar aquí en Ciudad de México, no llegó a funcionar en ninguno de los casos, porque estaba acondicionado únicamente para vialidades de buena calidad, no como las nuestras que cuentan con muchos baches. Así que todos sus componentes se desplazaban y dejaba de hacer mediciones”, explicó Ruíz Enríquez.
El dispositivo aún es, dijo, susceptible de mejoras, por ejemplo, agregarle una cámara y posteriormente buscar convenios con gobiernos o empresas interesadas en su implementación.
“Principalmente puede estar orientado a las áreas de los gobiernos de desarrollo urbano. Estamos abiertos, estamos esperando a que se dé esa colaboración y lo que tengamos que adaptar para ciudades particulares”, apuntó el investigador de la ESCOM, Roberto Zagal Flores.