Politécnicos trabajan en desarrollo de vacuna contra el dengue
Los politécnicos investigan cómo afecta el virus del dengue a los seres humanos el Laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales.
En el Laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales (LNVyVT), politécnicos estudian cómo desarrollar los principios básicos de vacunas, para males que afectan a la población, por ejemplo, contra el dengue, que causó 478 fallecimientos en México.
Desde saber cómo el dengue esquiva el sistema inmunológico hasta identificar alguna estrategia para reforzar las defensas, son dos de las directrices que son investigadas en el LNVyVtT de la Escuela de Ciencias Biológicas del IPN.
“Ha ido incrementando año con año, 2023 fue terrible para el dengue. 2024 creció todavía más el problema y entonces nosotros aquí, algunas de las investigaciones que hacemos en la cuestión básica, es tratar de entender cómo se produce el daño que causa el dengue”, explicó la directora LNVyVT, Isabel Salazar Sánchez.
Para entender la evolución del dengue, detalló Salazar Sánchez, se lleva a cabo la técnica in vitro a fin de ver los efectos que puede tener este virus sobre las plaquetas y examinar cómo se pueden revertir los daños.
También, se realizan análisis al mosquito que transmite el virus del dengue a fin de reconocer otros factores que favorecen la propagación.
“Si los mosquitos en esas regiones tienen alguna particularidad que los hace susceptibles a infectarse en mayor grado, o si existen algunas otras especies de mosquitos que podrían estar participando en la transmisión del virus”, agregó Salazar Sánchez.
Aunque en el mercado existen dos vacunas contra el dengue, aún se requiere encontrar una alternativa que resulte efectiva para las cuatro variantes reconocidas.
Es una labor compleja, pero en la que trabajan día a día los politécnicos.
“El dengue se ha tornado en un problema difícil de taclear en la cuestión de las vacunas, porque se tiene que proteger contra cuatro serotipos, porque en cada ocasión que te puedas infectar existe la posibilidad de que, las infecciones subsecuentes sean más graves”, finalizó Salazar Sánchez.