No se autorizará otra Torre de Mítikah mientras esté esta administración, aseguró la Jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
Esto respondió luego de que se le preguntó en conferencia de prensa, sobre que ya se está demoliendo el Centro Comercial Coyoacán para continuar con el proyecto del Consorcio Fibra 1 en el Pueblo Xoco, alcaldía Benito Juárez.
“¿Por qué razón? Es una zona muy impactada, ahí el Pueblo de Xoco ha tenido muchos problemas que todavía no han sido resueltos, entonces, otra torre en ese lugar va a tener un impacto mucho mayor, entonces, no”, señalo la jefa de Gobierno de Ciudad de México.
“Una cosa es primera y segunda etapa, inclusive dimos hace tiempo una conferencia sobre este tema, pero no está autorizado en este momento nada de eso y cualquier cosa necesariamente tiene hablarse con los vecinos particularmente de Xoco”, agregó.
Cabe recordar que el pasado 23 de septiembre nuevamente los habitantes de esta zona protestaron frente al complejo departamental durante su inauguración, pues desde que se anunció el proyecto de departamentos y comercio se sienten desplazados y afectación a sus servicios como el agua y predial.
Centro Coyoacán cerró sus puertas
El pasado 19 de septiembre la plaza comercial Centro Coyoacán, ubicada en avenida Universidad, en la alcaldía Benito Juárez, cerró sus puertas. Esta plaza permaneció abierta durante 33 años. Fue inaugurada en 1989, por el arquitecto Javier Sordo Madaleno, y el inmueble es propiedad del Grupo Palacio de Hierro.
El 23 de septiembre se inauguró el Centro Comercial del Complejo Mítikah, sólo a unos metros de distancia, sobre avenida Real Mayorazgo.
Este centro comercial tuvo una inversión de 22 mil 500 millones de pesos y abarca una extensión de 120 mil metros cuadrados, equivalentes a dos veces el Estadio Azteca. Además, según información de Mítikah, esperan recibir una afluencia de entre 50 mil y 60 mil personas diarias.
Con esta situación, habitantes originarios del pueblo Xoco revivieron su preocupación y rechazo ante este megaproyecto, por la posible construcción de más edificaciones.
Desde hace algunos años, cuando se anunció la expansión de estos megaproyectos, los habitantes se opusieron de forma rotunda y denunciaron afectaciones a este sitio histórico. Y es que entre esas problemáticas resalta que los habitantes no tienen acceso al agua y los costos del predial se han disparado.