Valle de México

Campesinos de Ciudad de México resisten a la mancha urbana

El pueblo de San Andrés Mixquic es conocido en todo el mundo por su celebración el Día de Muertos, pero también es la comunidad con mayor producción de hortalizas que se venden en los mercados de Ciudad de México.

Son ellos los encargados de llevar sus verduras a la Central de Abasto y de ahí repartirlas a los hogares y negocios de la capital mexicana y varios estados conurbados.

Sin embargo, este año las verduras no salieron de Mixquic. La tierra agrietada y las cosechas sin cortar son los síntomas de una mala temporada que resisten los campesinos dentro de una de las ciudades más grandes del continente. 

José Luis Medina es productor de hortalizas, tiene romero, acelgas, y algunas semillas de brócoli que intercambia con otros campesinos. Esas semillas se le quedaron de la cosecha pasada porque decidió no vender la verdura.

El precio estaba totalmente abaratado en el mercado. Ofertar el kilo de brócoli le resultaba contraproducente porque invirtió más en la siembra de lo que podría ganar por toda su cosecha. Así que los brócolis se dejaron madurar, se secaron y después el señor José Luis extrajo las semillas para venderlas o intercambiarlas con otros productores. 

El pueblo tiene tres zonas: chinampera, ejidal y privada. Cada lugar se rige por las autoridades que les representan. La zona chinampera y la zona ejidal compartían el agua que salía de un brote en el centro de los canales. La producción del campo y la forma de vida dependían de ese ojo de agua que ahora luce totalmente seco. 

El agua sólo se abastece a 72.6% de la población de la gran metrópolis y según Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), se requieren 2 millones 712 mil 960 metros cúbicos de agua al día para esa función. De esa cantidad, 58% sale del manto acuífero (pozos) y 12% de sus manantiales.  La sobreexplotación del manantial está a 120% pero no en la zona agrícola de la ciudad. 

Algunos de los productores dependen de los programas gubernamentales para el campo, en Ciudad de México es la Comisión de Recursos Naturales la encargada de repartir los apoyos al campo que se utilizan para las redes de riego o préstamos para la inversión.

A pesar del poco abastecimiento de agua y recursos económicos, los productores siguen trabajando el campo. Para los hortaleros la tierra no sólo es un trabajo, es una forma de vida que se sostiene desde generaciones antepasadas.

Son estos campesinos de Mixquic los que resisten a la mancha urbana que se va expandiendo y secando todo a su paso.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button