El término ‘robot‘, generalmente nos hace pensar en avanzada y compleja maquinaria trabajando en fábricas o vagando por otros planetas. pero en realidad se encuentran entre nosotros y desde hace mucho.
Se dice que la lavadora fue inventada por un ingeniero llamado Alvin Fisher en 1910, año en que se le otorgó la patente, aunque se sabe de algunas lavadoras eléctricas desde al menos la última década del siglo XIX
Las lavadoras automáticas llegaron ya entrado el siglo XX, dando inicio a la automatización de nuestra vida cotidiana. quizá si mira su lavadora en este momento le parezca exagerado llamarle robot, sobre todo si tiene en mente, ya no digamos a Robocop, sino a Wall-e. Sin embargo, sí lo es; el término hace referencia a elementos mecánicos que pueden desempeñar alguna actividad sin requerimiento de supervisión, humana e indefinidamente.
La palabra robot fue acuñada por el ingeniero checo Karel Capek en 1920 para su obra de teatro de ciencia ficción, que hace referencia al trabajo esclavo de las máquinas que se revelan contra sus creadores.
Así que la premisa de Terminator o de Galáctica tal vez no era tan original como muchos llegamos a creer.
Pero los ‘milirobots’ podrían cambiar eso. Wanfeng Shang y Yajing Shen de la City University de Hong Kong desarrollaron un milirobot gelatinoso con una garra que le permite hacer algunas manipulaciones, hecho a partir de una solución de gelatina mezclada con micropartículas de óxido de hierro que luego se enfría y recubre de sulfato de amonio para hacerlo más resistente.
El óxido de hierro permite manipularlo a distancia mediante la modulación de un campo magnético y aunque esto le resta autonomía, es el primer paso, o la primera contorsión, hacia robots con verdadera autonomía y que tal vez se puedan lavar a máquina.