Científicos descubren virus desconocidos en animales salvajes consumidos en China
Los expertos utilizaron una técnica de “metagenómica”, que analiza muestras en busca de transcripciones de ARN que los virus producen cuando se copian a sí mismos
Un equipo internacional de investigadores publicó en la revista Cell un estudio en el que anuncian haber hallado decenas de virus desconocidos, muchos de ellos potencialmente peligrosos para los humanos, en animales salvajes consumidos tradicionalmente como manjares en varios países asiáticos.
Se sabe que los mercados de animales vivos han provocado brotes, como el síndrome respiratorio agudo severo (SARS) hace 2 décadas. Pero un estudio subraya el alcance de la amenaza, mostrando que “hay una enorme cantidad de diversidad viral sin muestrear” en los animales.
Los humanos debemos entender que para un virus, diferentes especies de mamíferos pueden parecerse bastante, siempre que sus células tengan los receptores apropiados”, explicó el biólogo evolutivo de la Universidad de Harvard, William Hanage.
Esta realización ha hecho que China haya tomado medidas drásticas contra la venta de los animales muestreados en el estudio, pero otros países de la región no lo han hecho.
Estudio
Los investigadores, dirigidos por el veterinario Su Shuo de la Universidad Agrícola de Nanjing, tomaron muestras de casi 2 mil animales que representan 18 especies diferentes en lugares de China, incluidas granjas peleteras, zoológicos y hábitats naturales.
La mayoría eran especies que tradicionalmente se comen como manjares en China, incluidas las civetas, los perros mapaches, los tejones, las ratas de bambú y los puercoespines.
Utilizando una técnica de “metagenómica”, que analiza muestras en busca de transcripciones de ARN que los virus producen cuando se copian a sí mismos, identificaron 102 especies de virus de 13 familias virales diferentes en la nariz, las heces y los tejidos de los animales. Sesenta y cinco de los virus nunca se habían descrito antes.
Además, los investigadores consideraron a 21 como de “alto riesgo” para los humanos, porque habían infectado a personas en el pasado o simplemente tenían un historial de saltar fácilmente entre especies, según el estudio de la revista Cell.