El modernizado Gran Colisionador de Hadrones (LHC, por sus siglas en inglés) funcionará a energía de colisión máxima a partir de este marte, que da comienzo al tercer período de recolección de datos durante experimentos con partículas subatómicas.
“El LHC operará continuamente durante casi cuatro años, con una energía de colisión récord de 13.6 teraelectronvoltios, aportando a los experimentos una precisión y un potencial de descubrimiento sin precedentes”, comunicó la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN).
Asentado en la frontera entre Francia y Suiza, el acelerador de partículas más potente del mundo volvió a funcionar el pasado 22 de abril, luego de pasar tres años apagado para la realización de trabajos de mantenimiento y modernización.
Su nuevo nivel de capacidad permitirá obtener más colisiones de protones acelerados, en dos haces enviadas en direcciones opuestas a velocidades cercanas a la de la luz y a través de un anillo subterráneo de 27 kilómetros de diámetro.
Se espera que los experimentos brinden avances en el estudio del bosón de Higgs -partícula descubierta con el LHC en 2012-, a la vez que arrojen nueva luz sobre la enigmática materia oscura y posibiliten investigar otras partículas masivas, dando nuevos pasos hacia la resolución de problemas fundamentales de la física.