El planeta perdió en promedio cerca de 70% de su población de animales salvajes en casi 50 años, según la última evaluación del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), que establece una relación cada vez más clara entre pérdida de biodiversidad y calentamiento climático.
Aunque el cambio climático es el tercer factor, los expertos advierten que su papel “aumenta muy, muy rápido”.
Siguen la contaminación del aire, del agua y del suelo, así como la diseminación por el hombre de especies invasivas.
“De la misma forma que es necesario disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, es urgente revertir la pérdida de biodiversidad y el declive y degradación de los ecosistemas. El Informe nos da información esencial para restablecer nuestra rota relación con el mundo natural y muestra lo apremiante que es integrar principios de justicia ambiental y social en el centro de los cambios.”
En el marco de la próxima conferencia de biodiversidad COP15 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es prioritario impulsar un plan global que, como el Acuerdo de París, tenga como meta revertir las pérdidas y mejorar la salud de las poblaciones silvestres y los ecosistemas, comentó Luis Germán Naranjo, director de conservación de WWF Colombia.
El Informe monitorea a casi 32 mil poblaciones de 5 mil 230 especies del planeta y ofrece la imagen más nítida sobre su evolución con que se cuenta hasta ahora.
El parámetro de medición es el Índice Planeta Vivo (IPV), el cual hace un seguimiento de la abundancia en poblaciones de mamíferos, aves, peces, reptiles y anfibios. La relevancia de las tendencias registradas es que muestra una instantánea de los cambios en los ecosistemas y alerta sobre su estado de salud.
De igual forma, el IPV permite observar medidas de éxito cuando se aplican políticas de conservación adecuadas.