Un cuarto de la población mundial, que depende del deshielo del Himalaya para su abastecimiento de agua, enfrenta un riesgo “muy grave” de escasez este año debido a la importante disminución de las nevadas en la cumbre.
A través de un informe, científicos advirtieron que, en esta región, el deshielo alimenta aproximadamente una cuarta parte del caudal total de 12 grandes cuencas fluviales que nacen en altitud.
“Se trata de una señal de alarma para los investigadores, los responsables políticos y las comunidades que viven aguas abajo. La menor acumulación de nieve y la fluctuación de los niveles de ésta aumentan considerablemente el riesgo de escasez de agua, especialmente este año”, señaló Sher Muhamad, del Centro Internacional para el Desarrollo Integrado de las Montañas (Icimod), con sede en Nepal.
De acuerdo con el organismo, la nieve y el hielo del Himalaya constituyen una fuente de agua esencial para los 240 millones de personas que viven en las regiones montañosas y los 1,650 millones que habitan en su cuenca en varios países.
Permanencia de la nieve en el suelo
Para la investigación, se midió el tiempo que la nieve permanece en el suelo y este año, los niveles disminuyeron en casi un quinto de lo normal en toda la región de Hindu Kush, cordillera ubicada entre Pakistán y Afganistán, así como en el Himalaya.
“Este año la persistencia de la nieve es 18.5% debajo de lo normal; es la segunda más baja de los últimos 22 años, justo después del récord de 19% establecido en 2018”, precisó Muhamad.
El Icimod, que ha vigilado la nieve en la región durante más de 20 años, advierte que este 2024 es particularmente inusual.
Resalta que la cuenca del Ganges, que atraviesa India, presenta la “persistencia de la nieve más baja”, 17% menos que la media, mientras que el río Helmand, en Afganistán, registró también sus segundos niveles más bajos de persistencia de la nieve, situándose 32% por debajo de lo normal.