Una alargada vértebra y un conjunto de dientes afilados, de nueve centímetros de largo, son parte de los restos de un antiguo tiburón, hallados en el desierto de Ocucaje, en Perú.
Esa región estuvo bajo las aguas del mar hace millones de años.
“Estamos presentando un tiburón fosilizado de la cuenca Pisco, específicamente de la formación Pisco, que está datada hace 9 millones de años. Este fósil de tiburón se llama Cosmopolitodus hastalis, y fue producto de un trabajo en conjunto de tres instituciones”, comentó César Augusto Chacaltana, del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico de Perú.
Esta especie, ancestro del actual tiburón blanco, era un depredador tope, que llegaba a medir hasta nueve metros de largo.
“Es una muestra de fosilización excepcional para el mundo, es el Cosmopolitodus hastalis, que es el abuelo del tiburón blanco actual, este fósil ya no existe, está extinto, pero existe el tiburón blanco”, detalló el especialista.
Entre las características del ejemplar, resguardado en el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico de Perú, es que sus restos revelan también que su alimentación estaba basada en sardinas y que era un tiburón de aguas profundas.
“Es un tiburón pelágico, en su interior se encontró contenido estomacal, muchas sardinas, en esa época no había anchovetas, la manera, la sardina era la que formaba la esencia del alimento de todos los animales marinos”, explicó el paleontólogo Mario Urbina Schmitt.
En la presentación del Cosmopolitodus hastalis, también se mostraron otros fósiles como un cocodrilo y un delfín ancestrales.