Los lagos más grandes del mundo reflejan tendencias del cambio climático
Dieciséis años de datos de teledetección revelan que en los lagos de agua dulce más grandes de la Tierra el cambio climático influye en las tendencias de fijación de carbono.
Una investigación financiada por la NASA sobre los 11 lagos de agua dulce más grandes del mundo combinó observaciones de campo y satélites para proporcionar una nueva comprensión de cómo los grandes cuerpos de agua fijan el carbono, y de cómo interactúan el clima cambiante y los lagos.
Los científicos del Instituto de Investigación Tecnológica de Michigan (MTRI) estudiaron los cinco Grandes Lagos Laurentianos que limitan con Estados Unidos y Canadá; los tres Grandes Lagos africanos, Tanganica, Victoria y Malawi; Lago Baikal en Rusia, y los lagos Great Bear y Great Slave en Canadá.
Estos 11 lagos contienen más del 50% del agua dulce superficial de la que dependen millones de personas e innumerables otras criaturas, lo que subraya la importancia de comprender cómo están siendo alterados por el cambio climático y otros factores.
Los dos lagos canadienses y el Lago Tanganica experimentaron los mayores cambios en la productividad primaria: el crecimiento de algas en un cuerpo de agua.
Las fluctuaciones de la productividad apuntan a grandes cambios en los ecosistemas lacustres.
La base de la cadena alimenticia en estos lagos es la productividad de las algas. Estos lagos son de tamaño oceánico y están formando equipo con fitoplancton, pequeñas algas”, señaló el coautor Gary Fahnenstiel, miembro de MTRI.
A medida que esa tasa cambia, ya sea en aumento o en disminución, significa que todo el lago está cambiando, lo que tiene ramificaciones en toda la cadena alimentaria, desde el zooplancton hasta los peces”, agregó.
Muchos factores afectan estos lagos.
El cambio climático, el aumento de nutrientes y las especies invasoras se combinan para causar un cambio en todo el sistema, lo que dificulta identificar causas específicas, particularmente desde el suelo con observaciones limitadas en el sitio.
Pero las imágenes de satélite han facilitado la clasificación del ruido y proporcionan información sobre el tiempo y el espacio.
Hemos confiado en los activos de la NASA. El satélite MODIS, que ha estado volando desde 2002, al que aplicamos el algoritmo y el modelo que hemos estado desarrollando en MTRI durante una década”, mencionó Michael Sayers, científico investigador del MTRI.
Cuando comenzamos a contar la cantidad de píxeles como observaciones a nivel mundial para 11 lagos durante 16 años, es realmente notable. Los píxeles observados por lago se cuentan en millones, indicó.
Uno de los aspectos más notables de los resultados es la rapidez con la que se han producido cambios en estos lagos de agua dulce, una cantidad notable en menos de 20 años.
La investigación contribuye al objetivo del Sistema de Monitoreo de Carbono de la NASA de determinar cuánto contribuyen los lagos de agua dulce al ciclo global del carbono.
En los 16 años de datos, los lagos Great Bear y Great Slave, en el norte de Canadá, experimentaron los mayores aumentos en la productividad, mientras que el lago Tanganica en el sureste de África ha experimentado disminuciones.
Las tendencias están relacionadas con el aumento de la temperatura del agua, así como con la radiación solar y la reducción de la velocidad del viento.