Pequeños y elegantes robots de seis ruedas se cruzan en la acera ante la indiferencia general.
En esta zona residencial de Milton Keynes, a 80 kilómetros al norte de Londres, los repartidores automatizados forman parte del paisaje desde hace más de tres años.
Actualmente, hay 200 que recorren las calles de esa ciudad y también de la vecina Northampton, entregando las compras o las comidas.
Pronto serán 500, colonizando cinco nuevos municipios, especialmente en la región de Cambridge y en el norte de Inglaterra.
Con la pandemia, los robots han sido muy solicitados y se han vuelto indispensables.
Todo el mundo necesitaba entregas sin contacto”, dijo Andrew Curtis, jefe de operaciones en Reino Unido del grupo que construye y explota a estos autómatas.
La empresa, que multiplicó por cuatro sus entregas, efectúa hoy mil repartos diarios en el país y la demanda no ha disminuido pese al fin de las restricciones”, agregó.
Starship Technologies acaba de firmar un nuevo acuerdo con la cadena cooperativa de supermercados Co-op, uno de sus socios históricos, para poner a disposición 300 nuevos robots para finales de año y multiplicar por tres las entregas.
Frente a una de las sucursales del supermercado en Milton Keynes, la primera en utilizar este servicio en 2018, una decena de robots esperan pacientemente.
Sus antenas, flanqueadas por una pequeña bandera naranja para ser más visibles, les dan un falso aire de pequeños autos chocadores.
Un empleado sale de la tienda y deposita en el capó de uno de ellos un pedido.
Con la tapa cerrada, el robot se lanza inmediatamente por la acera, gira y avanza para cruzar la calle, antes de retroceder para dejar pasar un automóvil.
Estos robots están equipado de cámaras y sensores, lo que los hace 99% autónomo.
Si el autómata se encuentra frente a una situación desconocida, un operador puede conducirlo a control remoto.
Para Co-op, el reto es también medioambiental.
Se trata de reducir las emisiones de carbono en los últimos kilómetros de entrega, evitando que los clientes conduzcan para ir a una tienda o que reciban sus pedidos en un vehículo que funciona con gasolina”, explica la empresa en un comunicado.