La sonda japonesa, Hayabusa 2, retornó a la tierra, luego de una misión exitosa en el espacio.
Su recorrido inició hace 6 años para una misión que sonaba imposible: posarse sobre la superficie de un asteroide de 435 metros de diámetro orbitando a más de 300 millones de kilómetros de distancia.
En 2019 la sonda aterrizó sobre el asteroide y tomó muestras de su superficie antes de emprender el regreso a la tierra, que se completó este domingo.
Hemos completado la misión de manera exitosa y obtuvimos las muestras. La sonda Hayabusa-1 nos abrió la puerta a los viajes interplanetarios y ahora pasamos a través de esa puesta con la Hayabusa-2”, señaló Yuichi Tsuda, coordinador de proyecto Hayabusa 2.