La empresa Space X puso en órbita 60 nuevos satélites, considerados de clase pequeña, cuyo peso no supera los 300 kilogramos, que se sumarán a la constelación Starlink, que ahora está conformada por 835 dispositivos orbitales.
Con esto, la empresa busca ofrecer servicio de internet satelital a todo el mundo.
El lanzamiento de este domingo 18 de octubre fue el décimo cuarto de la misión Starlink; se espera que el miércoles 21 se lancen 60 satélites más desde Cabo Cañaveral, Florida, en Estados Unidos.
El objetivo es tener una red con miles de satélites que permitirán una conectividad de mejor calidad y más barata que los servicios actualmente disponibles.