Telescopio Chandra detecta Rayos X emitidos desde Urano
El observatorio espacial Chandra de la NASA capto por primera vez la emisión de Rayos X desde el planeta Urano.
Esto puede ayudar a los científicos a aprender más sobre este enigmático planeta gigante de hielo en nuestro Sistema Solar.
Urano es el séptimo planeta desde el Sol y tiene dos conjuntos de anillos alrededor de su ecuador.
El planeta, que tiene cuatro veces el diámetro de la Tierra, gira de lado, lo que lo hace diferente de todos los demás planetas del Sistema Solar.
Dado que la Voyager 2 fue la única nave espacial en volar por Urano, los astrónomos actualmente confían en telescopios mucho más cercanos a la Tierra, como Chandra y Hubble para aprender sobre este planeta distante y frío que está compuesto casi en su totalidad por hidrógeno y helio.
En el nuevo estudio, los investigadores utilizaron observaciones de Chandra tomadas en Urano en 2002 y luego nuevamente en 2017.
Vieron una clara detección de Rayos X desde la primera observación, analizada recientemente y un posible destello de Rayos X en las obtenidas 15 años después.
¿Qué podría hacer que Urano emitiera Rayos X?
La respuesta: principalmente el Sol.
Los astrónomos han observado que tanto Júpiter como Saturno dispersan la luz de Rayos X emitida por el Sol de forma similar a como la atmósfera de la Tierra dispersa la luz del Sol.
Si bien los autores del nuevo estudio de Urano inicialmente esperaban que la mayoría de los Rayos X detectados también fueran de dispersión, hay indicios tentadores de que al menos otra fuente de Rayos X está presente.
Si más observaciones confirman esto, podría tener implicaciones interesantes para la comprensión de Urano.
Una posibilidad es que los anillos de Urano estén produciendo Rayos X ellos mismos, que es el caso de los anillos de Saturno.
Urano está rodeado de partículas cargadas como electrones y protones en su entorno espacial cercano.
Si estas partículas energéticas chocan con los anillos, podrían hacer que los anillos brillen en Rayos X.
Otra posibilidad es que al menos algunos de los Rayos X provengan de auroras en Urano, un fenómeno que se ha observado previamente en este planeta en otras longitudes de onda.