La historia de las criptomonedas comenzó en 2008 con la concepción del bitcoin, un protocolo de transacciones en línea, cuya principal fortaleza se basa en la encriptación de cada movimiento en miles de computadoras repartidas aleatoriamente en distintas partes del mundo en un sistema que se denomina “blockchain” o “cadena de bloques”.
En pocos años, las aplicaciones del blockchain y las criptomonedas se multiplicaron hasta superar 8 mil alternativas distintas hoy en día.
Pero su aplicación va mucho más allá de transacciones económicas. Hoy, esta tecnología también es aprovechada por artistas para comercializar obra digital; le llaman “Criptoarte” o “NFT´S”.
Lo que sucedió ahorita es que ya podemos guardar cierta cantidad de archivos con una especie de archivadores que vienen a ser los blockchain, que son los que guardan estos registros y entonces ya se puede adherir un archivo digital o una obra de arte a un contrato, de modo que la persona que va a adquirir una obra sabe perfectamente qué es lo que está recibiendo”, dijo Joaquín Restrepo, artista plástico.
La seguridad que ofrece una transacción mediante blockchain también está siendo aprovechada como una herramienta de autentificación inalterable.
Con el blockchain, la propiedad y la autoría de nuestro arte digital está garantizado, incluso si alguien copia nuestro trabajo, solo existirá una pieza original.
En concreto solo una persona tiene esa propiedad, es como si adquirimos un póster de la Mona Lisa y lo colocamos en nuestra habitación, esto no significa que seas propietario de la obra. La Mona Lisa está en el Louvre y le pertenece al museo. Aquí es lo mismo, puedes tener la obra, pero esta sólo tiene un dueño y es el único que puede venderla”, señaló Axel Reynes, jefe digital, Casa de Subastas Millón.
Joaquín Restrepo, es un artista plástico que comenzó a experimentar con criptoarte y nft’s. Ha creado al menos tres obras digitales y una de ellas ya fue comercializada.
Digamos que como que se rompió la cúpula y ya por fin, el arte físico y el arte virtual logran compartir un estatus muy parecido”, mencionó Joaquín Restrepo, artista plástico.