El 3 de diciembre de 1839, el grabador francés Jean Prelier, marcó el nacimiento de la fotografía en México.
Fue un daguerrotipo (fue el primer procedimiento fotográfico) del puerto de Veracruz, en el que se aprecian el convento de San Francisco y el Castillo de San Juan de Ulúa.
La fotografía creció exponencialmente con la aparición del color en México.
Exponentes como Manuel Álvarez Bravo, Lourdes Grobet o Mariana Yampolsky, dejaron registro fotográfico de formas de vida a veces ocultas.
“Es meramente el punto de un iceberg de imágenes. tienen que imaginar, cuando van caminando por esta exposición, que en muchos casos tenemos una sola fotografía de un artista que representa todo un proyecto’’, afirmó el curador James Oles.
“Mexichrome” es una ambiciosa muestra sobre la historia de la fotografía a color en México, en apenas 200 piezas de 80 autores, busca establecer una convergencia de miradas sobre temas específicos, como la violencia, la bandera o las tradiciones.
“La fotografía en color para nosotros hoy en día con nuestros teléfonos parece algo normal, cotidiano, gratis. y la realidad es que para muchos fotógrafos, el color fue un reto: algo difícil, algo muy caro, algo a veces inalcanzable’’, consideró el curador James Oles.
Y si yo digo que revisamos diez o veinte mil imágenes para hacer la curaduría de esta exposición, sería modesto.
Reúne el trabajo de fotógrafos de México, Estados Unidos, Europa y Sudamérica.
Por su parte, la directora del Museo de Bellas Artes, Alejandra de la Paz, dijo que “Es una exposición icónica y seguramente será un referente en la historiografía de la fotografía en México. es de alguna manera una invitación a mirar de una manera mucho más atenta el devenir de la fotografía en color’’,
“Mexichrome” se puede visitar de martes a domingo en el Palacio de Bellas Artes.