El artista cubano-estadounidense, Franz Klainsek, se instaló en el Museo de los Pintores oaxaqueños. Ahí, durante tres meses, de noche y de día, se encargó de dar forma a “Pray”, su obra reciente.
“Te sientas en ese espacio con esas energías, también un edificio, lo que me gusta tanto de México, es que hay mucha historia’’, dijo el artista visual, Franz Klainsek.

Más de 100 mil clavos de oro, calibrados y distribuidos, a lo largo de la Sala Tamayo, revelan al visitante las variantes de los caminos de la vida.

“No es un camino por el parque siempre, pero estamos como me gusta decir a mí, en el alineamiento perfecto, estamos aprendiendo lo que tenemos que aprender en ese momento y algunas veces no es fácil, pero si podemos y vamos a seguir adelante, fuerte de mente y de corazón’’, dijo Franz Klainsek.
Hasta el 15 de abril, “Pray” estará en avenida Independencia 607, en el centro de Oaxaca.