La construcción del tren maya que recorrerá el sureste del país ha permitido descubrir más de 25 mil bienes de inmuebles arqueológicos, por ello el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto anunció que se reajustará el tramo cinco sur que conectará Cancún-Tulum para proteger el sitio arqueológico “Paamul II“.
“Este sitio cuenta con más de 300 edificios, algunos con alturas de más de ocho metros y va a resguardarse, va a reservarse como un sitio, un corredor ecológico y arqueológico en esta parte del Tramo cinco Sur”, comentó Prieto Hernández.
Asimismo, detalló que el salvamento arqueológico del tramo cinco sur presenta un avance de 11%. Además, informó que el tramo cinco sur del Tren Maya tiene 89% de avance de prospección y salvamento arqueológico para continuar con su construcción, a pesar de que las obras se detuvieron por un tiempo.
Lo anterior, como parte del programa de mejoramiento de zonas arqueológicas y salvamento ecológico que acompaña la construcción del Tren Maya.
“En el tramo cinco ya ha habido tres ajustes de la ruta y ahora hay una suspensión. Con lo que se ha encontrado vamos a ver si este último trazo que se nos ha ofrecido es pertinente. Lo más probable es que lo será, no se preocupen. Lo que les quiero señalar es que tenemos la instrucción del Presidente de que la cuestión ambiental y la arqueológica se cuiden de manera muy particular”, explicó Prieto.
El INAH indicó que como parte de los trabajos arqueológicos que acompañan la construcción del Tren Maya en los tramos uno a cinco, se hallaron hasta ahora 458 mil 730 fragmentos de cerámica, 305 vasijas completas y 23 mil 778 estructuras inmuebles: cimientos, plataformas, basamentos piramidales o caminos.
Además de 373 enterramientos humanos, algunos en superficie y otros sumergidos en cuevas o cenotes; mil 334 bienes muebles diversos: cerámica, metates y bienes, la mayoría relativamente completos; y 775 rasgos naturales asociados a contextos arqueológicos como cuevas, pozos y cenotes o estructuras para la siembra o canalización de aguas.
“Por supuesto que en el tramo cinco hay hallazgos, pero lo mismo hay en todos los tramos. ¿Qué si se cambia el trazo? Pues igual va a haber muchos hallazgos, el problema no es el trazo, el problema es el acompañamiento arqueológico para poder recuperar el material que se va encontrando y para conservar las estructuras que deben permanecer en el sitio”, aseveró Prieto.