A fin de fortalecer el diálogo entre las autoridades y el cuerpo de profesores y de alumnos de las casas de estudios adscritas al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se realizó la serie de conversatorios “Las escuelas del INAH en el contexto de la pandemia 2020-2021”.
En este espacio de conversación digital y en el cual participaron estudiantes y maestros de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM) y de la Escuela de Antropología e Historia del Norte de México (EAHNM), se enfatizó el profundo pesar que al interior de estas instituciones educativas ha causado la COVID-19.
En este contexto inédito y global, en el que desafortunadamente han fallecido colegas, amigos, familiares e, incluso, vecinos de quienes laboran o estudian en las escuelas del INAH, también se ha hecho patente la enorme capacidad de resiliencia ante dicha adversidad y los efectos psicológicos, físicos y sociales que la enfermedad conlleva.
Esa misma resiliencia, señalaron autoridades del INAH, se ha mostrado para defender la importancia del quehacer institucional de la dependencia y, en particular, de la labor cotidiana de las tres escuelas mencionadas.
En este sentido, las mesas de conversación también insistieron en la necesidad de garantizar la suficiencia presupuestal para las actividades sustantivas de las escuelas, sin obnubilar la contingencia sanitaria por la que atraviesa México.
Asimismo, se hizo hincapié en aspectos positivos que han derivado de la virtualidad, como el mayor acercamiento entre las escuelas del INAH ubicadas en la Ciudad de México y la EAHNM, en Chihuahua, mediante la organización de actividades, las cuales pueden llegar a públicos más amplios y diversos, a través de medios electrónicos.
Alumnos de las tres escuelas, quienes participaron en la mesa “La voz de los estudiantes en tiempos de pandemia”, hicieron un reconocimiento a sus profesores, quienes, dijeron, se han visto en la necesidad de adaptar sus modelos de enseñanza, sin olvidar que, al igual que todas las personas, lidian con situaciones familiares complejas en el contexto de la contingencia sanitaria.
Aunque reconocieron que la virtualidad ha permitido llevar programas de apoyo psicológico al alumnado, o bien, modelos mixtos de enseñanza en los que muchas actividades pueden seguir realizándose vía internet, lo que se traduciría en ahorros económicos para muchos estudiantes, también insistieron en la necesidad de plantear, en el corto plazo, modelos que permitan el regreso paulatino a las aulas, priorizando la salud de estudiantes, maestros y personal administrativo.
Lo anterior, concluyeron, toma especial importancia para los estudiantes del INAH en disciplinas como la arqueología, etnología, antropología y restauración, entre otras, cuya enseñanza requiere en gran medida de clases presenciales y de la verificación de prácticas de campo.