Hace 100 años, en 1923 comenzó a escucharse ‘La B Grande de México‘, estación radiofónica que hoy forma parte del Instituto Mexicano de la Radio (IMER), emisora que llegó al corazón de sus radioescuchas, como sucedió con doña María Eugenia y su Pedro.
“Me gusta el baile y con esas canciones mi esposo me conquistó, con las canciones de Pedro Infante oíamos la serenata cuando estábamos recién casados; con él dure 53 años de casada y apenas hace tres años falleció y con esa música me conquistó, pues me decía, Pedro Infante es inocente. Cómo él se llamaba Pedro…”, dijo la radioescucha María Eugenia Gómez.
Memorias y evocaciones a la historia sonora de México… Nunca se perdió la esencia de personajes como Pedro Infante, que comenzó a cantar en la XEB.
“Tenemos información, tenemos cultural, tenemos deportivo y aparte esa convivencia con la audiencia; nos sentimos acompañados con ellos, con los locutores”, señaló la también radioescucha, Rosaura Pérez.
Para conmemorar los primeros 100 años de ‘La B Grande de México’, el Palacio de Bellas Artes fue escenario idóneo, lugar que al ritmo de esos temas que roban suspiros celebró con la orquesta sinfónica del IPN y el tenor Juan Manuel Chu.
María Eugenia Gómez agregó: “la pase de maravilla, fue una cosa maravillosa, muy diferente oírla con la sinfónica y el tenor que con Pedro Infante, me gusto mucho, pero PedroInfante tiene su gracia y su Ángel”.
“La verdad la música de la sinfónica del Politécnico Nacional fue una maravilla, el tenor y la gente vino a recordar mucho, la verdad es que se ha convertido en una radio entrañable, esa es la palabra donde tienes muchas cositas guardadas de muchos amores”, concluyó Aleida Calleja Gutiérrez, directora general del IMER.
Tertulia de amor recíproco entre La B Grande y sus radioescuchas, inmortalizada en un billete conmemorativo de la Lotería Nacional.