En su infancia, la persona deprimida sufrió una herida emocional que nunca sanó, se hizo trauma profundo que convirtió su vida en angustia y la única salida aparente es un círculo vicioso.
El tema de la depresión, el tema de la herida, una herida que nos sucede en el comienzo de la vida y que primero corremos en sentido contrario. En ese sentido construimos una máscara, una personalidad, una manera de sobrevivir’’, consideró la actriz Carolina.
La obra “La persona deprimida”, de David Foster Wallace, es el retrato asfixiante de la depresión de una mujer.
Más que un relato sostenido, el monólogo es desahogo.
La actriz Carolina Politi se apropia de las preocupaciones del personaje para caer en espiral hacia las aguas oscuras de los trastornos mentales.
Nuestra intuición nos va guiando o nuestra torpeza nos va guiando o nuestra terapia. Siempre hay algo que nos guía, porque lo que está en el centro de todo esto es que queremos seguir viviendo y queremos pertenecer, queremos que nos quieran’’, aseguró la actriz.
El montaje de “La persona deprimida”, bajo la dirección de Daniel Veronese, se encuentra en el Teatro Benito Juárez solo este fin de semana.