Una “Magdalena penitente” de Salai, principal colaborador de Leonardo da Vinci, fue subastada este miércoles en París por 1.7 millones de euros (2 millones de dólares), superando con creces su precio estimado, informó la casa Artcurial.
De 65 cm por 50 cm, la obra, en buen estado, representa a María Magdalena sobre un fondo negro, con la mirada en éxtasis y los brazos cruzados.
Estimada en entre 100 mil y 150 mil euros (116 mil y 174 mil dólares), la pintura fue adjudicada al cabo de una venta muy animada por teléfono y a puerta cerrada debido al confinamiento.
Solo se tiene conocimiento de un puñado de cuadros realizados por Salai, como el “Cristo redentor”, conservado en la Pinacoteca Ambrosiana de Milán. El resto se halla en manos privadas.
Gian Giacomo Caprotti, conocido como Salai (1480-1524), fue el principal colaborador de Leonardo da Vinci: fue su alumno, ayudante, modelo, tesorero, agente y amante. El maestro del Renacimiento le habría dado este apodo, sinónimo de “pequeño diablo”, puesto que era dado a mentir y hurtar.
Este cuadro es un verdadero hallazgo. Su propietario, que lo compró por una modesta suma, nos lo confió para su venta. Nos llegó sin atribución. Fue Cristina Geddo”, reconocida experta del periodo lombardo del siglo XV, quien “nos reveló que pertenecía a Salai”, explicó a la AFP el experto Eric Turquin, días antes de la subasta.
Hallamos sus huellas digitales: el pintor hundió su pulgar en la pintura fresca, algo característico de la técnica de Leonardo y Salai”, según Turquin.
La obra denota “un conocimiento perfecto de (la técnica) del esfumato de Leonardo”. Otro elemento reconocible es “un trazo blanco que marca el párpado inferior, dando una sensación de dureza que destaca el ojo”, indicó el experto.